Allí donde el pincel da forma y color
allí donde se refleja cual espejo el alma
en un bello amanecer pleno de esperanzas
allí los rayos de luz disipan las tinieblas
los truenos y tormentas callan sus lamentos
resplandecen aguas transparentes
la pupila se maravilla de contento
el corazón palpita y la razón olvida.
Se sumerge el ser en la imagen
en ese instante el viento canta al silencio
su lar…