Gracias a José Sánchez Hernandez y a Calle B su prestigiosa Revista Cultural, que desde Cuba publicó mi nota : "BUENOS AIRES: BARES QUE SON HISTORIA."

Búsqueda

            En mi caminar

                                      junto a El

ruego      en el jardín

                        del conocimiento.

Y mi súplica

                        es intensa

            para develar el trino y único

                          Misterio

del que vive mi alma.

Acepto que el sol

            de la Trinidad

      brilla en…

                       VI  

Conozco el correr de la distancia.

He visto viajes de peregrinos hacia el sol

      y caer la luna en un pecho.

      Apuré la copa en un ir y venir.

Y sé del espacio justo donde se moldean

los músculos hacia el golpe violento.

            Estoy cansada.

                 Y espero.

Ese sitio exacto donde el grito

       se rompe en un jardín.

Vilma…

                                                    Poema V

        Abierta

para recibir tus respuestas

antes de la piel y el misterio.

       Yo sé que dormías

y que roto y complaciente

te echabas uno de tus leños.

       Tendías tu cuerpo

(promesa de embriaguez…

Poema IV

Quizá mi sueño endulce tu fatiga

dolor desde el fondo de los huesos.

Quizá mi mano ayude a reparar

Ese sitio de Dios agujereado.

Geografía ignorada y presentida

      sin mapa        ni compás.

      Un bálsamo    mis manos

como una mariposa sobre tus párpados.

Vilma Lilia Osella…

Las Granadas de la Rita Gómez

Era el tiempo cuando no sentíamos ni demasiado calor ni demasiado frío, los

días eran claros, el sol brillaba con nunca velado esplendor y las noches

estrelladas nos dejaban jugar y contemplar las miles y miles de luciérnagas,

bichitos de luz que le daban un aspecto inusitado a la plaza de enfrente. Los

días cuando el jardín florecía en rosas y jazmines y los árboles de alrededor

daban deliciosos frutos. _ Los…

                  Poema II

        Salir al encuentro.

     Suspensión de toda hora.

Saber que existo en tu velero de gaviotas.

  Descubrir los grises de Buenos Aires

       Colmada de iridiscencia.

       Trazar una nueva lengua

    en el juego al descubierto

                   aurora Inicial.

Vilma Lilia Osella

De mi libro “Las Manzanas del Domingo”…

                                              I

Dejaré las máscaras

que ocultan que toda especie es anterior

al soplo de las formas.

Navegaré entre las vértebras

 y renovaré la alegría

cuando tu mano invite

a lo posible.

Liberaré susurros y sonrisas para habitarnos.

Poblaré amapolas hacia adentro

inevitable pradera mía.

Abriré puerta para encontrar las rosas

estremeciéndome.

Quizá exista sólo…