Iniciamos la segunda parte del libro LAS MANOS DE AMAR, 1971, EDITORIAL COSTA RICA, CON EL POEMA LLUVIA ADENTRO.

II

DEL FRÍO Y DE LA MUERTE

 …

y es que de pronto dejo esta carne 

esta sangre en el tintero de siempre

estos huesos almacenados en la locura

de un desván

pulso teclas y teclas

y me diluyo en la noche

soy un poeta más en el silencio

y me acompañan miles de versos entusiastas

al otro lado del espacio

donde el aire es solo la…

Arder...arder...

besándonos los ojos, 

sin sospechar siquiera que hay lluvia en primavera,

viento en el otoño,

un zarpazo de hielo en el invierno que vendrá

y que desconocemos.

Arder, arder…

No puedo llegar a los ojos.

No encuentro al silencio

con su inclinada nostalgia.

Mi boca va al beso como a un hermano.

Sin querer, el árbol sufre

su concepción de amor.

El río ha llegado;

no termina de llegar.

Yo te…

Las manos

son el mundo pequeñito

con que se hace el mundo.

La tarde es la simiente.

Jugamos a verter el beso de los cuerpos.

A llenar las manos, los ojos,

con el brío,

y con fe en las canciones cotidianas,

en los panes frescos.

La tarde…

Hermana, ¿me puedes comprender?

A veces llenamos los cántaros de hijos,

de esperanzas, cantos,

y se nos rompen como lluvia.

Hermana,

todo el amor del mundo se me rompe en la boca

con tu beso.

La tarde escucha…

Hermana, la tarde se me…

Acércate al silencio que te escucha ahora con la lluvia,

Al silencio de la noche

que llena tu cuerpo de sombras,

tu cuerpo de madera blanda, de madera oscura.

Acércate al cielo de nuestros ojos profundos,

al cielo de la noche que te cubre el cuerpo,

tu cuerpo de…

¿Cómo completar el silencio con la fuerza de los dedos?

¿Cómo languidecer de espera entre la llaga?

¿Cómo recorrerte los ojos con labios de alegría?

¿Cómo amarte con el vuelo desplegado de mis manos?

Soy una parte infinita de tu muerte.

Me cierro en la…

LLUVIA

La lluvia me golpea

con su brisa de gris

                                               en esta hora.

La lluvia me acaricia

con su otoño

                         de palmeras extasiadas.

La lluvia me impregna

las…

Otra vez el hijo en las entrañas

comenzará su nacimiento

como una lágrima viva.

¡Y, cómo tú, yo, toda la noche y nuestra muerte encima

con el alba,

transparentados por la lágrima,

por tu lágrima silenciada en el pezón, en el vientre,

en el sexo!

¿Comprendes, amor,

tu caricia…

El mar inagotable

regresa a ahogarse

en nuestros ojos.

El ocaso viene como un hermano desnudo

a hundirse en el mar.

La playa asusta a las gaviotas

con su interminable silencio.

Para nosotros;

el viento tiene su palabra

en cada palmera.

“Duerme, duerme,…

¡Cómo duele morirse en esta hora,

sin poder unir todas las manos,

definitivamente!

Y sentir que la sangre se nos sube a los poros.

Y sentir qué poco hemos hecho por el beso.

¡Cómo duele morirse en esta hora!

Y escuchar en el horno

un pan que no alcanza para todos.

¡Como duele morirse

sin poder unir siquiera todas las manos

con un beso,

definitivo!

Yo no…

Esta noche,

el viento coagula mi silencio

con canciones.

Y esta noche la lluvia abre en los ojos

la dulzura del beso.

Nos colocan las manos, la nostalgia.

Y esta noche hay protesta

y hay canciones en el corazón

profundo de los hombres.

Queremos asirnos a todo lo que parte

y nos vamos arraigando a lo que viene.

Hay, en la espera sensación de…

Nunca nada estuvo tan cerca como este hoy.

Y nunca nada me iluminó la cara con tanto grito.

Nunca sentí tan cerca este momento,

y nunca me dolieron tanto las manos de amar.

Nunca antes había entrado en tus ojos,

desde el silencio.

Nunca nada me detuvo en el camino

para…

Amada, esta noche,

afuera el silencio de las calles

con su música de lluvia,

vamos a sostener el mar con nuestra vida,

vamos a robar un poco de todo

lo que nos han robado.

Tomaremos este café,

y sentiremos, amor,

cómo la vida se nos va

mientras comemos juntos,

mientras…

Inicio el compartir de mi libro LAS MANOS DE AMAR, publicado en 1971 por la Editorial Costa Rica, escrito del 66 al 67, cuando tenía entre quince y diecisés años, y estudiaba la secundaria en el Conservatorio de Castella, secundaria con énfasis en arte. También participaba ya en los talleres literarios del Círculo de Poetas Costarricenses, la primera parte del libro es antecedida por el epígrafe de mi autoría

“¿Comprendes…