TRANSITAR

[Federico Landaeta]

       TRANSITAR

(POEMAS DEL ALMA)

           1986

 

Quisiera ir a la playa
para yo poder vencer
el vaivén de tantas olas,
el dormitar y el comer,
el sentirse atrapado
en el continuo querer…
pues del deseo las garras
no nos permiten crecer.

En el canto incesante
de las olas al romper
quisiera escuchar Su nombre,
quisiera sentir y ser…
quisiera saber que pronto
junto a Ti he de volver
y que Tu canto eterno
en Ti me hará renacer.

Y el renacer en Tu seno
significará saber,
saber lo mucho y lo poco
y muy claro poder ver
lo que es la vida y el mundo,
Lo que es morir o nacer,
saber que Tu eres eterno
y sólo Uno puede haber.

Quiero ir a la llanura
para sentir el calor,
el sol que lo abrasa todo
sólo con su resplandor...
el que igual nos da la vida,
que quema o da el esplendor
y llena nuestra existencia
con alegría o dolor.

Y en la llanura inmensa
que me ensancha en el amor
quisiera pasarme un tiempo
para olvidar el temor
que nos producen las ciencias
en las manos del terror,
las que fabrican las bombas
que producen tanto horror.

Quisiera estar en los llanos
que cambian tanto en color
según que llueva o no llueva
ellos cambian su verdor
por aquel oro reseco
de la paja en pleno ardor
cuando fallece del hambre
pero de pie… con honor.

Vivir quiero junto al río
para escucharlo cantar
y entender por qué es que corre
perseverante hacia el mar.
Ver que nada lo detiene
en su rítmico ondular…
Hasta que un día yo comprenda
lo que me quiere enseñar.

Y allí, junto al arroyo
yo me sentaré a esperar
para cantar incansable
hasta que yo pueda amar
a todo el que aparezca
en mi diario trajinar…
Así venga con un cuerpo
o tan solo en el pensar.

Porque se que junto al agua
un día lograré escuchar
aquel silente murmullo
que me permite pasar
a través de tantas vidas...
Se que allí podré lograr
la Paz que aún está dormida
en mi más interno hogar.

Me encerraré en la montaña
y de allí no he de salir
hasta que un día de las nubes
comprenda yo el existir.
Hasta que un día de la vida
entienda yo el devenir
y de las aguas inquietas
ese continuo fluir…

Me encerraré en un monte
pero jamás por huir.
sino a cantar la gloria
del que me hizo venir
a este planeta escuela
para aprender a vivir
y a pasar por este mundo
sin llorar y sin sufrir.

Me iré a una montaña
y allí me voy a morir.
Me monré a los vicios
que saben tan solo herir,
me moriré a los llantos
de este continuo sentir
pues tan sólo en esa forma
me lograré yo expandir.

 

Swami Deva Pradípam

(Federico Landaeta)

[Federico Landaeta]

Gracias, Gianina, por tu filosófico comentario...

Bendiciones incesantes

[Federico Landaeta]

Marco... el honor es mio por tu visita a "TRANSITAR", por compartir los deseos de Libertad y por las pinceladas que dejas en mi trabajo.

Bendiciones incesantes

[marco gonzalez]

Cuanta verdad poeta un honor estar en sus letras

[Federico Landaeta]

Muy hermoso tu comentario sobre "TRANSFORMACION", Tere... G  R  A  C  I  A  S

BENDICIONES INCESANTES

[Tere Matthews]

También quisiera ir a la playa y experimentar todo ese sentir, ese que transforma nuestro espíritu, liberándolo totalmente de todo apego terrenal.  Como comenta César:  "por vivir tan aprisa nos olvidamos de vivir"...  La naturaleza es dadivosa y obtenemos tan poco de ella!

Una hermosa composición, maestro... lo felicito! 

Abrazos y bendiciones, 

Tere Matthews          

[Federico Landaeta]

Cesar Eduardo... tienes toda la razon... nos hemos olvidado de VIVIR...

Bendiciones incesantes

[Federico Landaeta]

Gracias, Luis, por ese aplauso tan sostenido...

Bendiciones incesantes

[César Eduardo Albarracin]

Buen retiro espiritual te planteas Amigo Federico (Swami Deva Pradípam). Es verdad, para llegar a conocer profundamente el sentido de la vida es necesario "bajarse" por un momento del mundo y habitar en hogar más interno del que hablas en tu bello poema. Vivimos tan apurados que nos olvidamos de vivir. Felicitaciones Fede.

[Luis Lema Osores [L3mOs]]

¡Muy bien amigo Federico!

[Federico Landaeta]

Un millón de gracias, Jose Ramiro, por tus palabras cargadas de comprensión y de cariño...

Bendiciones incesantes