A la par de su actividad creadora en la poesía y la reflexión humanística, Mila ha dedicado amor y atención ilimitados a todos los miembros de la UHE. Su voz acompaña el quehacer de esta casa de cultura, en beneficio de cada uno de nosotros y por la exaltación de los valores de nuestra América y de Venezuela.
Le damos un abrazo fraternal y le expresamos gratitud por el empeño de extender la paz que nos guía por el mundo.
El alma de SorGalim es como el fondo de un pozo: desde su profundidad pueden verse las estrellas en pleno día.
Felicidades, querida amiga, en nombre de todos.
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¿Que pudiera regalarle a SorGalim sino admiración y un afecto inmenso? Ella ha sido para mí un apoyo en mi actividad literaria, además de brindarme una amistad cargada de ternura y alegría, siempre con una sonrisa. Podemos llamarla: Sor Sonrisa, y no fallaremos.
La queremos mucho todos, y yo la amo con la suave brisa de las mañanas de Altagracia.

CADA 16 DE MARZO

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Cada 16 de marzo

Milagros, SorGalim, despertará

con una fina lluvia de luces

y sentirá que la sequía terminó.

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Se alegra y canta en voz baja

esas canciones y tonadas

con que nos regala a veces.

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Será un día esplendoroso

para Mila Ingeniera de Sueños:

dispuesto el colorido matinal

que se envuelve de tul.

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El canto de la alondra

le dice que el día nace

y ella está presta para iniciar sus tareas.
Pero mira el calendario: 16 de marzo.

¿Qué significa?

No lo ha captado todavía

pero escucha algo como un vagido infantil,

el primero de la existencia terrenal,

y se percata de que es ella misma

la que ha dejado escapar ese gemido de ternura,

un suspiro de llano abierto

y música de cencerros.

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Mila ahora sabe que es su día,

su aniversario florido

que viene con la lluvia tanto tiempo esperada.

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Sale a la ventana

y allí están los gorriones

en una escala de nubes haciendo el coro.

Le cantan a Mila sus milagros.

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SorGalim está contenta.

Y ella sabe que todos sentimos su misma alegría.
Escucha ahora nuestra musitada

melodía de cumpleaños

y nos agradece.

Pero somos nosotros los agradecidos

ante este día de festividad.
Desde hoy  y para siempre

le dejamos nuestro beso inacabable:

el amor que se comparte.

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¡Felicidades, Mila querida!

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ALEJO URDANETA