Podrás  mil veces oír que digo

que te amo.…

Cesa la tormenta

la paz llena el aire…

Con tibio encanto

la  dama se levanta…

El mar me llamaba…

Jesús carpintero, tu cincel toma

Y labra mi alma a tu medida…

Mi corazón está calcinado…

Dame un beso en la distancia
besa al tiempo, besa a la nada.
Besa al viento para que este
lo atrape y lo difunda por el aire
si acaso llegue a mis labios
y lo sienta descarnado
y lo bese con mi alma,
un inasible beso
como besa la ilusiòn,
como besa el olvido.  

Qué bien suena tu cimera palabra,

eres mujer que arrancas la maldad del alma.…

Mi pequeña Elizabeth,…

Las palabras

nos encierran, nos liberan…

Pablo, allá en la inmensidad de la palabra

donde tu luz nos enceguece de tanta claridad:…

El aparente vivir sin sentido cierto

y errante vagar de humo abierto,

Es como de azucenas pléyades,

que en el yermo crecen sin tardes,

ni arroyos de corriente…

Y el  tiempo pasa, como pasa la desolación

de los atribulados, de los sedientos de rosas.…

Qué pocas cosas vivimos juntos

el tiempo tuvo complejo de inferioridad…

Navegar mar adentro por su vientre,

mirar las sombras y los peces.…

                                     A Marìa Magdalena   

Tu cabellera negra, mujer,

no es pena sino alegría.…

Llevas en tu mirada cien abismos

que te separan de los otros seres…

Entre mis manos la escarcha…

María reverbera en mí

Igual que el mar en paz,…