"ALICIA JURADO" fellece poeta argentina.

[Rafael Merida Cruz-Lascano]

Por: Rafael Merida Cruz-Lascano

22Mayo 1922—9 mayo 2011
Una vez confirmada la noticia del fallecimiento de Alicia Jurado, Además de escritora y miembro de la Academia Argenti“Alicia Jurado” ha fallecido el lunes recién pasado.

22Mayo 1922—9 mayo 2011
Una vez confirmada la noticia del fallecimiento de Alicia Jurado, Además de escritora y miembro de la Academia Argentina de Letras, Jurado fue también Doctora en Ciencias Naturales, activa participante del legendario Grupo Sur, miembro de la Academia Argentina de Letras -desde 1980. las letras argentinas volvieron a teñirse de negro en señal de luto. Quien partió en esta oportunidad había llegado al mundo el 22 de mayo de 1922 y, al crecer, pudo demostrar que era una de esas almas privilegiadas que saben hacer maravillas con una pluma. A los 88 años mure la célebre escritora Alicia Jurado, reconocida por su gran talento literario y por su cercanía con el escritor Jorge Luis Borges, con quien escribió su famosa obra "Qué es el budismo".
Esta mujer que se formó en Ciencias Naturales pero brilló a nivel internacional gracias a su sabia decisión de enfocar su atención en la actividad literaria ganó muchos premios en reconocimiento a su labor como escritora, pero muchos aficionados a las letras la recuerdan hoy como la amiga entrañable de otro grande de la cultura,

Jorge Luis Borges. "Estela Canto nos presentó. Fue en el año 1954, yo era una joven de 32 años y él tenía 55. Al principio sólo hablábamos de literatura aunque nos veíamos muy a menudo. Pero poco a poco surgió una relación más personal. Es que treinta años es mucho tiempo y las reticencias se van desgastando", describió en aquella oportunidad.
A su colega, recuerdan desde Perfil.com, Jurado le aportó ideas para desarrollar “Qué es el budismo”, así como también lo retrató de forma exquisita valiéndose de “recuerdos, sentimientos y opiniones propias”, tal como confesó ella en una oportunidad, en “Genio y figura de Jorge Luis Borges”.
A esta dama de las letras argentinas se la extrañará como a tantas personalidades que dejaron una huella imborrable como artistas pero, como siempre ocurre ante la partida de un intelectual, reconforta saber que su espíritu permanecerá siempre vivo a través de su legado.

Aquellos que recién hoy descubren la figura de esta autora deberían saber que quien se ha marchado esta vez fue una exponente del campo literario que perteneció a la Academia Argentina de Letras (así como también al Centro Argentino del PEN Club Internacional), que le dio forma a varias novelas, cuentos, biografías y memorias y que acumuló galardones como el Primer Premio Municipal de Novela y de Ensayo, la Faja de Honor de la Asociación Argentina de Escritores y el Premio Interamericano Alberti-Sarmiento. Sin dudas, por todo lo que ha significado para la literatura, la ausencia de Alicia Jurado será imposible de disimular a nivel literario. Alicia Jurado resolvió dar a la imprenta unos poemas escritos hace tiempo, cuando era joven aunque no principiante en el oficio de escribir. Perfectamente inteligibles pero tampoco anticuados, a pesar de que los haya con métricas clásicas, representan la poesía que algunas veces vuelcan los escritores en la prosa.

Quince monedas
[Poema: Texto completo]
Jorge Luis Borges
A Alicia Jurado
Un poeta oriental

Durante cien otoños he mirado
tu tenue disco.
Durante cien otoños he mirado
tu arco sobre las islas.
Durante cien otoños mis labios
no han sido menos silenciosos.

El desierto

El espacio sin tiempo.
La luna es del color de la arena.
Ahora, precisamente ahora,
mueren los hombres del Metauro y de Tannenberg.

LLueve

¿En qué ayer, en qué patios de Cartago,
cae también la lluvia?

Asterión

El año me tributa mi pasto de hombres
y en la cisterna hay agua.
En mí se anudan los caminos de piedra.
¿De qué puedo quejarme?
En los atardeceres
me pesa un poco la cabeza de toro.

Un poeta menor

La meta es el olvido.
Yo he llegado antes.

Génesis, IV, 8

Fue en el primer desierto.
Dos brazos arrojaron una gran piedra.
No hubo un grito. Hubo sangre.
Hubo por vez primera la muerte.
Ya no recuerdo si fui Abel o Caín.

Nortumbria, 900 A.D.

Que antes del alba lo despojen los lobos;
la espada es el camino más corto.

Miguel de Cervantes

Crueles estrellas y propicias estrellas
presidieron la noche de mi génesis;
debo a las últimas la cárcel
en que soñé el Quijote.

El Oeste

El callejón final con su poniente.
Inauguración de la pampa.
Inauguración de la muerte.

Estancia El Retiro

El tiempo juega un ajedrez sin piezas
en el patio. El crujido de una rama
rasga la noche. Fuera la llanura
leguas de polvo y sueño desparrama.
Sombras los dos, copiamos lo que dictan
otras sombras: Heráclito y Gautama.

El prisionero

Una lima.
La primera de las pesadas puertas de hierro.
Algún día seré libre.

Macbeth

Nuestros actos prosiguen su camino,
que no conoce término.
Maté a mi rey para que Shakespeare
urdiera su tragedia.

Eternidades

La serpiente que ciñe el mar y es el mar,
el repetido remo de Jasón, la joven espada de Sigurd.
Sólo perduran en el tiempo las cosas
que no fueron del tiempo.

E. A. P.

Los sueños que he soñado. El pozo y el péndulo.
El hombre de las multitudes. Ligeia…
Pero también este otro.

El espía

En la pública luz de las batallas
otros dan su vida a la patria
y los recuerda el mármol.
Yo he errado oscuro por ciudades que odio.
Le di otras cosas.
Abjuré de mi honor,
traicioné a quienes me creyeron su amigo,
compré conciencias,
abominé del nombre de la patria,
me resigné a la infamia.



El día lunes 9 de Mayo del 2011.
Fuentes:
Poema del Alma
Verónica Gudiña
La Nación. Com
Perfil. Com
L.S.F. com.ar.
Terra.
Ciudad SEVA.

na de Letras, Jurado fue también Doctora en Ciencias Naturales, activa participante del legendario Grupo Sur, miembro de la Academia Argentina de Letras -desde 1980. las letras argentinas volvieron a teñirse de negro en señal de luto. Quien partió en esta oportunidad había llegado al mundo el 22 de mayo de 1922 y, al crecer, pudo demostrar que era una de esas almas privilegiadas que saben hacer maravillas con una pluma. A los 88 años mure la célebre escritora Alicia Jurado, reconocida por su gran talento literario y por su cercanía con el escritor Jorge Luis Borges, con quien escribió su famosa obra "Qué es el budismo".
Esta mujer que se formó en Ciencias Naturales pero brilló a nivel internacional gracias a su sabia decisión de enfocar su atención en la actividad literaria ganó muchos premios en reconocimiento a su labor como escritora, pero muchos aficionados a las letras la recuerdan hoy como la amiga entrañable de otro grande de la cultura,

 

Jorge Luis Borges. "Estela Canto nos presentó. Fue en el año 1954, yo era una joven de 32 años y él tenía 55. Al principio sólo hablábamos de literatura aunque nos veíamos muy a menudo. Pero poco a poco surgió una relación más personal. Es que treinta años es mucho tiempo y las reticencias se van desgastando", describió en aquella oportunidad.
A su colega, recuerdan desde Perfil.com, Jurado le aportó ideas para desarrollar “Qué es el budismo”, así como también lo retrató de forma exquisita valiéndose de “recuerdos, sentimientos y opiniones propias”, tal como confesó ella en una oportunidad, en “Genio y figura de Jorge Luis Borges”.
A esta dama de las letras argentinas se la extrañará como a tantas personalidades que dejaron una huella imborrable como artistas pero, como siempre ocurre ante la partida de un intelectual, reconforta saber que su espíritu permanecerá siempre vivo a través de su legado.

Aquellos que recién hoy descubren la figura de esta autora deberían saber que quien se ha marchado esta vez fue una exponente del campo literario que perteneció a la Academia Argentina de Letras (así como también al Centro Argentino del PEN Club Internacional), que le dio forma a varias novelas, cuentos, biografías y memorias y que acumuló galardones como el Primer Premio Municipal de Novela y de Ensayo, la Faja de Honor de la Asociación Argentina de Escritores y el Premio Interamericano Alberti-Sarmiento. Sin dudas, por todo lo que ha significado para la literatura, la ausencia de Alicia Jurado será imposible de disimular a nivel literario. Alicia Jurado resolvió dar a la imprenta unos poemas escritos hace tiempo, cuando era joven aunque no principiante en el oficio de escribir. Perfectamente inteligibles pero tampoco anticuados, a pesar de que los haya con métricas clásicas, representan la poesía que algunas veces vuelcan los escritores en la prosa.

Quince monedas
[Poema: Texto completo]
Jorge Luis Borges
A Alicia Jurado
Un poeta oriental

Durante cien otoños he mirado
tu tenue disco.
Durante cien otoños he mirado
tu arco sobre las islas.
Durante cien otoños mis labios
no han sido menos silenciosos.

El desierto

El espacio sin tiempo.
La luna es del color de la arena.
Ahora, precisamente ahora,
mueren los hombres del Metauro y de Tannenberg.

LLueve

¿En qué ayer, en qué patios de Cartago,
cae también la lluvia?

Asterión

El año me tributa mi pasto de hombres
y en la cisterna hay agua.
En mí se anudan los caminos de piedra.
¿De qué puedo quejarme?
En los atardeceres
me pesa un poco la cabeza de toro.

Un poeta menor

La meta es el olvido.
Yo he llegado antes.

Génesis, IV, 8

Fue en el primer desierto.
Dos brazos arrojaron una gran piedra.
No hubo un grito. Hubo sangre.
Hubo por vez primera la muerte.
Ya no recuerdo si fui Abel o Caín.

Nortumbria, 900 A.D.

Que antes del alba lo despojen los lobos;
la espada es el camino más corto.

Miguel de Cervantes

Crueles estrellas y propicias estrellas
presidieron la noche de mi génesis;
debo a las últimas la cárcel
en que soñé el Quijote.

El Oeste

El callejón final con su poniente.
Inauguración de la pampa.
Inauguración de la muerte.

Estancia El Retiro

El tiempo juega un ajedrez sin piezas
en el patio. El crujido de una rama
rasga la noche. Fuera la llanura
leguas de polvo y sueño desparrama.
Sombras los dos, copiamos lo que dictan
otras sombras: Heráclito y Gautama.

El prisionero

Una lima.
La primera de las pesadas puertas de hierro.
Algún día seré libre.

Macbeth

Nuestros actos prosiguen su camino,
que no conoce término.
Maté a mi rey para que Shakespeare
urdiera su tragedia.

Eternidades

La serpiente que ciñe el mar y es el mar,
el repetido remo de Jasón, la joven espada de Sigurd.
Sólo perduran en el tiempo las cosas
que no fueron del tiempo.

E. A. P.

Los sueños que he soñado. El pozo y el péndulo.
El hombre de las multitudes. Ligeia…
Pero también este otro.

El espía

En la pública luz de las batallas
otros dan su vida a la patria
y los recuerda el mármol.
Yo he errado oscuro por ciudades que odio.
Le di otras cosas.
Abjuré de mi honor,
traicioné a quienes me creyeron su amigo,
compré conciencias,
abominé del nombre de la patria,
me resigné a la infamia.



El día lunes 9 de Mayo del 2011.
Fuentes:
Poema del Alma
Verónica Gudiña
La Nación. Com
Perfil. Com
L.S.F. com.ar.
Terra.
Ciudad SEVA.

[Alejandrina Arias]

hola mi querido Rafael, mucha gracia por el merecido homenaje póstumo, que se le da...

sus aportaciones siempre tan ciertas y llegadoras, mil gracias por compartirlo