¡De Dios al Hombre!

[Oriana Caterine Vieira Pacheco]

Contemple muchas noches las dudas que me agobiaban,

y entrañando recuerdos creí que solo estaba. 

Seguí andando en la estrechez de aquel camino

y su imagen a mi mente vino.

Fue como una ráfaga de luz enmarcando su pálido rostro,

en el vació de mi corazón nostálgico.

Una de esas tantas noches tome el valor de hablarle,

a aquel tan nombrado hombre, de proceder intachable,

de adoración memorable.

Por un momento pensé si él llegaría a escucharme,

por un momento dude que mi palabra pudiera alcanzarme.

Le pregunte por la dama en mi vida más importante,

le pregunte por la dama que el honor de la vida oso darme.

Le pregunte si a su lado ella fue más feliz, 

el ¿por que las mujeres se alejaban de mi?

Sorpresa más grande cuando le pude oír.

 

Con una voz de dulzura, con amor contagiante,

me dijo la mujer es pura, por eso ella es madre, 

te hablo de padre a hijo, te hablo de Dios a Hombre.

Las mujeres son bellas Diosas, radiantes como las flores.

 

las hice con tal dulzura, como una fruta madura,

las hice con tal firmeza y a la vez llenas de nobleza.

Les di un corazón de acero, maleable al estar al fuego.

llene sus vidas de hazañas, para que pudieran enseñarlas.

Les puse como reto al hombre, para que su fuerza desdoblen,

y aún así son tan perfectas que todo he de perdonarles,

aún cuando su baja autoestima mes haga reprocharles.

 

Las quiero, son mis pupilas, mis hijas,mi mejor hazaña  

y siempre que estén conmigo, se podre cuidarlas.

aunque a veces se descarrilen, no dejo de adorarlas,

les trato de hacer felices, los hice a ustedes para elogiarlas, 

quizá tu no las valoras por eso  no has de encontrarlas,

pero todo hombre en este mundo lleva a su lado una dama.

 

Elogialas con frescura, llénalas de palabras

y hechos que la hagan grande, que se sienta amada,

mira claro en sus ojos, tu alma verás reflejada,

acéptala con defectos, eso la hará más humana,

que tu entrega profunda, sea reflejo de mi alma,

que su sonrisa confiable te diga que te ama.

 

Te hablo de Dios a Hombre, tu madre esta en mi morada,

mirando su hermoso hijo, admirando maravillada. 

Feliz de que tu estas vivo, contenta porque me hablas,

te mira con ojos tiernos, te abraza cada mañana,

y te espera con mucho anhelo, el día que vengas a casa,

pero sabe que debes vivir primero el amor por una dama.

 

ORIANA VIEIRA

 

 

[Oriana Caterine Vieira Pacheco]

Amen poeta muchas gracias, que alegría que le gustará!!

[JUAN EDUARDO ANDÚJAR RODRIGUEZ]

Que hermosas letras poeta..las disfrute de principio a fin dios te bendiga.