investigación empírica

[juan pablo]

El amor, cualquier destino,

la pluma, el desespero, el conocerse.


Esta segunda investigación tratara de rescatar sin eufemismos, sin momentos efímeros, la construcción de una realidad, a partir de sueños, utopías. Llevando acuesta su cintura en mis manos, pues ya hice un estudio metafísico de ella, tuve que destruir las normativas metodológicas para poder enfrentarme a su naturaleza que sin duda alguna es muy compleja por lo mágica. Estos últimos años he tratado de llegar a lo más profundo, y poder deliberar el comportamiento de dos cuerpos, hombre y mujer dentro del marco del amor, siendo este un acto espontáneo.


Su magia empieza a visibilizarse desde sus 16 años, cuando un impulso demostró en un espacio oscuro, por supuesto al verse tentada y amenazada por la distancia, uno de los actos mas sinceros que he conocido, su beso. Ese roce comunicó la relación espíritu-cuerpo, hecho que me mantuvo inmóvil inyectando una dosis de fuerza que me daba la posibilidad de estar erguido ante cualquier desajuste. Al poder experimentar ese intercambio de fluidos concluí, que el elixir de la juventud por la cual han hecho tantas películas y han muerto tanta gente estaba escondido en ella, situación que llevó ha colocarla en un pedestal y a cuidarla bajo cualquier circunstancia.


Luego de todo ese problema experimente su abrazo, dando resultados muy provechosos para las ciencias del amor, abrazos que sin duda son capaces de ahuyentar la agonía de cualquier enfermedad, de aliviar la soledad, pues son sabanas naturales que alejan el frío y te protegen de cualquier vista asesina.


Ahora bien ya en esa etapa entre los 17 y 23 años llegué al meollo de la investigación, al núcleo que da origen su mágica vida, su sexo. Pude recoger datos que posiblemente hagan del futuro un mundo más digno pues sus sistemas reproductivos cuando son fecundadas podrían dar vida a los seres más maravilloso del universo. Ese arte lo palpe, conocí su sabor, sus movimientos, me mantuvo perplejo en un espacio donde la carne domino el tiempo, hizo que mi sistema circulatorio funcionara de la mejor manera, que expulsara la nicotina a través del sudor, es decir que su sexo además de salvar la humanidad podía curar todos mis males. Por supuesto que la fundamentación de esta investigación son percepciones muy personales y que desearía que nadie las verificara, solo ella, es que no estaría dispuesto a compartirlas con nadie.