NINA THURLER, VITAL Y ASOMBROSA

[Vilma Lilia Osella]

NINA THURLER, VITAL Y ASOMBROSA
Ensayo para la mesa: Poetas en el Recuerdo .XXI ENCUENTRO DE POETAS, NARRADORES Y ENSAYISTAS

VILMA LILIA OSELLA

Nació en Bragado, provincia de Buenos Aires en 1938. Partió en otoño, un 19 de junio de 2012. Fue dinámica, vital. Entendió, como artista, que el único camino posible es el propio. Trabajó arduamente para que la cultura se adentrara a un amplio público. Como especie, pulsionamos la vida a través de nuestro cuerpo físico. Como seres humanos, debemos decidir en conciencia, si aceptamos al principio ordenador llamado sistema cultural. Nina Thürler, una gran mujer, poeta argentina, trascendente, asombrosa, inteligente, de un temple y fuerza especiales que le permitieron imponerse en un medio difícil y alcanzar el reconocimiento del mundo cultural a través de su excepcional obra poética y su trabajo formativo, optó por mirarse y aceptarse. También proyectarse. Llegaba a las salas de la SADE donde se celebraba tal o cual libro, con una sonrisa suave y decía: “Yo soy la Secretaria Cultural de esta casa, vengo a acompañarlos”.
De espíritu inquieto, se dedicó a difundir a poetas y escritores a través de publicaciones, disertaciones. Expuso la obra de grandes actrices y actores. Fue antóloga de grandes recopilaciones culturales: dirigió el sello Editorial “Eleusis” con el que se editaron aproximadamente doce tomos de “Poetas Argentinos Contemporáneos”; ella fue la antóloga de toda la colección, en la cual fueron incluidos alrededor de ciento sesenta poetas argentinos del último siglo, entre los cuales esta cronista se ufana en participar.

En 1986, junto a Carlos Alberto Débole, entonces presidente de la SADE, el Dr. Guillermo Frugoni Rey y el escritor Antonio Di Benedetto fundaron el Grupo Poético “Para la Vida y la Paz”, que se inauguró aquel año, en la Feria Internacional del Libro, con un recital temático ofrecido por las actrices María Rosa Gallo, Perla Santalla, Cipe Lincovsky, Inda Ledesma, el actor Onofre Lovero y la participación de aquellos inefables personajes de la cultura argentina. Con este grupo, ofreció numerosos recitales en diversos espacios. Para conocerla mejor, es bueno recordarla en estos versos:

Poema XV 
Ayer te ibas
y un silencio de pájaros dormidos
un silencio de vientos acallados
de dioses despojados
de campanarios rotos
se sentó en mis caderas
se arrebujó en mi pelo

se ciñó a mis ojeras
ayer te ibas 
y un silencio sembrado de agonías
me pobló las pestañas
y se heló en mis mejillas

ayer te ibas 
y la tierra y el cielo 
confundidos
lastimaban tu partida

y Dios 
en el silencio del silencio
me tomaba las manos
me miraba los ojos

y te ibas...

(De “Mientras soplan los vientos de otoño”, 2000)

Esto habría bastado para decir quién era Nina Thürler. Pero hay más, allí cerca de los dioses Nina ha dialogado con ellos:

Fedra

Aquí estoy yo otra vez
con mi máscara intacta de tragedia
aquí estoy
yo erguida nuevamente en este siglo de tormentas
de aconteceres bárbaros (…)
(De “Desde la memoria de los dioses”, 2005)

Hay en Nina Thürler una introspección profunda, visionaria, reveladora. 
El mundo de las letras la he reconocido a través de distintas distinciones y premios. Los medios periodísticos han dicho de ella: cito, “... es en el ámbito de la poesía de nuestro tiempo una de sus cultoras de mayor talento artístico (....) clara, directa, profética, abierta a la luz y a las sonoridades cósmicas, rica en lenguaje, la voz dotada de Nina Thürler consiguió alcanzar lo que buscan sus versos, enriquecernos espiritualmente, contagiarnos de un fervor que apaga enconos, que cala y suaviza el fuerte contenido de nuestros eternos interrogantes...” (Frag. de una nota del Diario “La Prensa” de Buenos Aires del 8 de octubre de 1989). Y hay otras voces en diferentes medios que la ponderaron: cito, “(...) es una de las voces más firmes y concentradas del panorama poético femenino de la Argentina…” (De Cuadernos de Poesía Nueva, Madrid, España, noviembre de 1987). Una tarde, en una rica charla que nos envolvía, Lucho María Sobrón me escuchó decir “Es una de las poetas más intensas de nuestra generación” y corrigió “Es la mejor poeta de tu generación”.
“Nina Thürler en “Los Habitantes de la Casa Rebelde” crea un poema dramático que expresa la angustia existencial, la cosmovisión casi trágica impuesta por la época y traduce en versos de resonancias musicales y en imágenes de cautivante belleza, el ansia de elevación, el afán de alcanzar las alturas, la región radiante donde caduca la fugacidad (y más adelante) “Los Habitantes de la Casa Rebelde”, de N.T. ingresa por la puerta grande en la galería de los libros de poesía latinoamericana de primera línea” (Frag. Del comentario publicado en la revista Alba de América, publicación del Instituto Literario y Cultural Hispánico, (ILCH), California, EE.UU., julio de 1994).

Nos acercaban a las dos, vivencias similares: teníamos hijos con capacidades diferentes. Esa mancomunión nos colocaba en el mismo cuerpo del fluido, nos dimensionaba sobre la urdimbre propia del dolor. Y la resurrección, la resiliencia. Podíamos hablarlo o no, recitar juntas o tomar un café charlado con la única voluntad del deslumbramiento. Éramos cómplices. Quizá terminaríamos celebrando “Las Ruinas Circulares” de Jorge Luis Borges y esa resignificación del mito de Pigmalión en que surgió Galatea, como dijo alguna vez nuestra común amiga, Ma. Cristina Pizarro. Así sería hasta que nos volviéramos a encontrar.
Finalmente, voy a enunciar sus libros, hijos que nos dejó para el deleite, sin antes recordar que Nina amaba a los griegos. Y ellos a Nina.

Obras: “La piel del viento” (1984); “América, te amo!” (1985); “Las campanas del tiempo” (1986); “Con las lluvias de abril” (Faja de Honor de la SADE), 1987; “En la región del pájaro y el ángel” (1989); “Naufragio de Mariposas amarillas” (Faja de Honor de la ADEA-1990; “Memorial de América” (1992) “Los habitantes de la Casa Rebelde” (Primer Premio Certamen Nacional de Poesía Papiros del Siglo XX, 1994); “Los pájaros heridos”, 1997; “Juan L. Ortiz, Cosmovisión y Poética”, ensayo editado por la Biblioteca Nacional, 1998; “Mientras soplan los vientos del otoño” (2001).
“Desde la memoria de los dioses” (Poemario homenaje a los XXV siglos del nacimiento de Pericles (2005), “Tiempo de ausencias y campanarios rotos” (2009). 
Sus premios fueron numerosos. Entre sus distinciones se cuentan:
Primer Premio Publicación de la Ed. Poesía Buenos Aires (libro: La piel del viento) 1984
“Pluma de Plata “-Editorial Argenta, 1984
Tercer Premio Ateneo Popular de la Boca, 1984
Premio al Mérito Cultural - Universidades Populares Argentinas, 1984
Premio Libertad Americana - Ateneo Poético Argentino, 1984
Faja de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores –1988
Faja de Honor de la Asociación de Escritores Argentinos-1990
Beca para la Producción Literaria del Fondo Nacional de las Artes –1991
Primera Mención de Honor – Secretaría de Cultura de la Provincia de Córdoba –1992
Primer Premio Nacional Papiros del Siglo XX- 1993
Finalista en el certamen de Poesía sobre Don Quijote y Sancho Panza (Publicación) Convocado por el Frente de Afirmación Hispanista Ciudad de México (DF)-2005.
Mención Especial del CERTAMEN DE POESIA AMOROSA DEL SIGLO XXI (Publicación) Convocado por el Círculo de Bellas Artes de Palma de Mallorca – España – 2006
Premio al Mérito Cultural otorgado en el marco de la XXXIII Feria Internacional del Libro de Buenos Aires (2007) por la Asociación Argentina Amigos del Libro Argentino y americano.
Habrá más pero no voy a agobiar al público con datos. Voy a decir, sin embargo, que el poeta y periodista Jorge Lomuto, compañero de Gente de Letras, le escribir´a su partida.

VistaComentario

[Vilma Lilia Osella]

Gracias a vos Hugo por leer y devolver.

Vilma Lilia

[hugo]

Hasta hace minutos no tenía noción acerca de esta poetisa, Vilma Lilia, y te agradezco especialmente por habernos compartido este artículo tan valioso. Abrazonrisas y mis buenos augurios para ti. 

[Vilma Lilia Osella]

GRACIAS, ELIAS.

VILMA LILIA

[Elias Antonio Almada]

Muy buen trabajo amiga