Poblado de silencios
Poblado de silencios
Miro con nostalgia las estrellas.
No entiendo por qué se oculta la luna,
Por qué se agita el mar y resuenan las olas, esta tarde.
No entiendo por qué se apagan las ilusiones con los años.
Ni entiendo por qué a partir de los cincuenta, los años se aceleran.
Poblado de silencios
Cuestiono a mi ocaso,
Por no ser tan hermoso como el encanto de esta tarde
A mi pasión deshojada, acorralada, hoy, muy distante de su savia.
A mi pobreza por ser tan agresiva y por su carencia
Imperturbable de nobleza.
Y cuestiono a mi todo por no haber aprendido a ser nada
Y a mí nada por apropiarse de todo.
Poblado de silencios
Cuestiono mi verano emocional,
Y a este invierno que me confina a una cobija sin vivencias.
A mi sombra que no deja de perseguirme
Y a mí luz extenuada, oculta debajo de la mesa.
Y sigo cuestionando
A mi soledad poblada de seres espirituales
Y a mis lúbricos deseos.
A mis tinieblas y a mi sol que ya no quema.
A mi alegría autoexcluida, arrinconada sin su chispa original.
A mi miseria envanecida en sus carencias.
Poblado de silencios
Temo
A mis miedos, a Mis mitos, a mis ideas, a mis dogmas,
A mis sueños que no dejan de soñar,
Al discurso rutinario aprendido hace tanto y que se aferra agresivamente
En mi memoria, porque mi conciencia lo trata de cambiar.
Y cuestiono duramente
A los bloqueos reaccionarios que se me vienen de repente
Y a mis secretas aspiraciones que quieren esfumarse.
Poblado de silencios
Me aterra la sordera de mi alma.
Me aterra también el estrépito inmoral de su silencio,
Sus laberintos y la crueldad de sus recuerdos.
Y Me aterran
Mis ilusiones, mis quimeras agredidas por la trama de mi suerte.
Me aterran la telaraña de mis genes, el futuro sin mañana
La luna negra al acecho, ocultándome el camino, como siempre.
Y me estremecen
Este huracán de pasiones encontradas,
Este ánimo embotado,
Y estas contradicciones turbulentas que como espuelas
Se clavan en mi pecho.
Y me decepciona, tremendamente
Conocer de cerca a los amigos desleales, traidores, oportunistas y ambiciosos y me aterra haber tenido tan cerca sus calañas.
Y me duele
Recordar diariamente, mis ayeres,
Mis secretos,
La deserción de mi inocencia,
Mis salvajes pensamientos,
Mi dolor, mi yo, mi ser y lo no sido, mis ausentes,
Mi qué, mi no sé, mi nunca y mi siempre,
Mi fécula expoliada,
Mi presencia.
Poblado de silencios
No comprendo
Por qué la providencia se encuentra tan lejana,
Por qué no le llegan mis plegarias, enfebrecidas en silencio.
Por qué la prosperidad que he llamado a voces desde joven, no me llega.
Poblado de silencios
Me encuentro aquí
Deslustrado por necias contradicciones y presunciones temerosas
Atribulado por reproches morales y el manoseo de mi suerte
Encrespado por oraciones aparcadas en el limbo
Que motivaron la insubordinación de mi palabra
Poblado de silencios
Me encuentro Envuelto, Entreverado
Entuercado entre mi infancia herida, mi modesta adolescencia
Y la penitente intimidad de mi adultez.
Poblado de silencios
Me quedo aquí
Ensalmado en un mutismo invicto y fervoroso,
Conjurado
En la fogata de mis versos.
Juan José Romero López
Piura - Perú
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
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