REENCUENTRO

[Humberto González Ortiz]

“… a todos esos merolicos cibernéticos que cómo yo, de vez en cuando ejercen, de poetas…”

 

Llevo unos meses alelado

Aturdido por las circunstancias de esta economía globalizante

Que nos mantiene

En ascuas

A la defensiva

A la expectativa

Y pendientes mas de las páginas de las bolsa de valores (¿quién les habrá puesto ese nombre a estas bolsa que en lo último que piensan es en eso, en los valores?) que de la cartelera de los cines, o de la geopolítica internacional

Es por eso que nosotros

Que ejercemos de vez en cuando de poetas no podemos andar con la palabra

Esgrimida

Vilipendiada

Recatada

Dócil

Desafinada

Porque siempre están por allí los listillos que se apuntan a un bombardeo (y lo digo con la literalidad de la palabra) y no dejan de estar allí, friegue y friegue a la gente de a pie que debe cada día sobrevivir

Con un dólar al día

Con 10 dólares a la semana

Con 1000 dólares al año

Con 20000 mil dólares al mes

Que deben simplemente sobrevivir

Y sobreviven

Es por eso que nosotros

Que ejercemos de vez en cuando de poetas no podemos bajar la guardia ni un tantito así

Porque nosotros (y dejo claro que yo ejerzo más de peatón que de poeta) observamos con los ojos grandotes y abiertos, y nos encabronamos con las primeras planas y los editoriales, y nos acurrucamos en el vuelo del colibrí para salvarnos, y nos apalancamos en la cama que sutilmente nos ofrece a una mujer en cueros

Así de simples somos nosotros los poetas

Y es por eso que los canallas nos prefieren atontados

Porque así ellos hacen de las suyas y

Obligan a miles de libios a correr hacia Túnez

Obligan a los luchadores de Juárez a salir por patas al exilio

Obligan a los arquitectos a buscar prefabricados para autoconstruir ciudades perdidas

Obligan a las músicos a exprimirse el seso para la nueva trova combativa

Obligan a los filósofos a rebuscar entre Sartre, Heidegger y Platón para explicar una sonrisa

Obligan a los militares libios a huir con avión a Malta para no asesinar mas niños a mansalva

Obligan a este poeta a dejar de ser peatón y volver a rebuscar, y reordenar, y repensar sus alocadas palabras que resuenan huecas en su voz callada

Y expulsarlas

¡Lejos!

Justo allí donde los oídos de mis compañeros peatones se sensibilizan cuando miran estupefactos a este

Loco y merolico peatón que a todo pulmón, y en medio de la calle

Vuelve nuevamente a ejercer íntimamente su reconfortante oficio

/ De poeta /

[ALBERTO O. CABREDO ECHEVERRIA]

HERMOSO POEMA, FELICITACIONES

[Maigualida Pérez González]

Buenas letras. Te felicito. Un abrazo,

Maigualida

[Humberto González Ortiz]

Hola Luis, no te creas!... en México se han empezado a mover algunas cosas porque tambien secuestra y asesinan a los que ganan, 20 mil dólares al mes!. saludos y gracias por el comentario

[Humberto González Ortiz]

Milagors, mas bien gracias a vos por dejarnos a nosotros... 'estar'!

[Humberto González Ortiz]

Benedito, saludos!

[Humberto González Ortiz]

Carmen... eso es lo que yo mas disfruto tambien!... Saludos!

[Humberto González Ortiz]

Gracias Lu... saludos

[Humberto González Ortiz]

Alberto, si te movió la silla entonces... vale la pena ser poeta!

[Humberto González Ortiz]

Senda gracias, llevo rato en vuestra asociación solo que poco tiempo tengo de sentarme tranquilo a escribiros.. un abrazo fraterno!

[ALBERTO O. CABREDO ECHEVERRIA]

Me movio la silla amigo, hermano de pensamiento, palabra y obra, que no de omisión, tremendo lo escrito, aplausos