Regálame tu tiempo libre

[marco gonzalez]

Mi velero perdió el rumbo.

Mis pensamientos vuelan hacia ti.

Eres la rosa más hermosa,

que se ha posado en mi jardín.

Deseo contemplar cada porción

de tu esbelto cuerpo,

que con sabiduría,

supo broncear,

la madre naturaleza.

Una luz de encantos

anda revoloteando por mi cabeza,

porque pusieron en un vergel de margaritas

las más bellas de las rosas.

Nada más perfecto que tu cuerpo de Diosa.

Como poder olvidar cada milímetro

de tu bella silueta de diva.

Si desde que te conocí,

no tengo más pensamientos,

que pensar en ti.

Tus pechos sobresalen por su excelencia,

es la perfección que une al universo,

sólo por ti.

Tu esbelto y apasionado cuerpo me disuaden,

a explicar lo inexplicable,

porque con palabras no se puede describir,

la perfección que la naturaleza colocó en ti.

Hoy se desgarra de deseos mi alma,

porque contigo,

quiero bellos momentos compartir,

Sé que jamás seré tu dueño,

pero permíteme,

por unos momentos,

ser feliz.

 

 

 

 

 

[Iris del V. Ponce P.]

Eso es el placer de sentir y magnificar los dones y las virtudes que poseemos ante los ojos del ser amado, aunque para los demás sea sólo un espejismo.

Muy vivaz  descripción de esa musa que ocupo tu pensamiento para estampar tan finas letras en tu prosa.

Saludos.

[Federico Landaeta]

Una descripción detallada de la diva de los sueños... un clamor apasionado por disfrutar su cuerpo... y una realidad muy clara, no poder llegar a ser su dueño...

La conclusión es lapidaria... UN RUEGO:

pero permíteme,

por unos momentos,

ser feliz

Bendiciones incesantes