Amor, estoy buscando el tiempo que he perdido…
Aquí sentado, desde ayer y para siempre, en el olvido;
He visto, amor, volar las mariposas de tu jardín
Sembrando en el aire un arcoíris en tus flores.
Amor, no me quedan sino las preguntas del silencio,
El roce tangencial del viento entre tu ser y mi ser.
Ayer fui tu amante, mujer, cubrí tu piel con mi piel
Hasta que la noche se hizo lánguida en la aurora.
Ahora, mujer, no sé de tu presente y tu futuro…
Y el pasado se me hizo una constante, y de hoy en adelante
Espero verte perder entre las brumas de mis sueños…
Yo sé que fui un pequeño entre tus brazos
Y un beso, sin sonido, hecho añicos por el viento.
Y volé sin medir tus sentimientos… Tú lloras y yo siento
Cómo una daga me atraviesa el fluido de mi sangre…
Cierro los ojos y me hundo en la espesura…
Ahora, que negrura, que dolor y que tortura.
Mis quejidos se los ha llevado el viento. Y tu voz,
Se ha perdido en mi amargura…vas al viento. Voy al viento
Cual ave que su nido ha perdido entre sus brumas…
Vas al viento… y voy al viento. Que no calle tu noche…
Porque la obscuridad no fue un obstáculo para amarnos,
Fue simplemente un sello que marcó nuestros caminos…
Y el hogar quedó completamente solo...
Ahora, vas al viento...¡ Y voy al viento!
Autor: Dalit R. Escorcia Marchena.
Barranquilla, 6 de febrero del 2007