POEMA Nº 16. MUSA DE LA MUJER
AUTOR: MARÍA DEL PILAR BARRÓN
Mirada almendrando el respiro del deseo
nacimiento intenso de amorosa pintura
en el paspartu de tu intangible presencia
con el marco de Julio Romero de Torres
poeta de los colores pincelares: gracias.
Labios encarnando el deseo de besarlos
cuello medular de la razón y la pasión
brazos aterciopelados en la madurez del abrazo
senos reales de diosa y mujer de continentes
entre cinco naranjas y manos de artista.
Gracias por la maestría de tonos vivientes
en el atardecer en que tomo las naranjas
por la ventana alta del destino atardecido
para beber también del arte del sentir.
Historia añejando sentimientos
susurro interior del mismo deseo
mudra y faldellín del naranjo florido
simetría de la perfección central
con perspectivas del encuentro artista
donde una gota en tu rostro sediento
me descubre la nerviosa pasión
aterciopelando la sensualidad de los deseos.
Naranjas agradecidas al Ser Divino
por sentir tu presencia en acidez vital
abrazando entre las manos fervientes
caricias del agradecimiento dulce
enoladas de nobles sentimientos marinos
en el encierro de un castillo humano.
Suelto tus cabellos infinitos al sol de suaves hombros
adiamantados en el corazón de tu voluntad
ensombreciendo los limones con esenciales óleos
para engrandecer a la musa de la mujer.
Mágico árbol de pincel enfrutado
abrazando el beso del amante
en la sombra con tu fuente divina
y los abrazos de la vida constante,
voy a sembrar en la maceta vacía
sueños mágicos de eterno encanto.
Existencia plena de la razón sin tiempos
naranjas dulces son mis ojos en tus manos
limones deseados en el imperio del amor
mariposas de cariño, sonrisas del naranjo
cabalgando en la memoria de ilusiones
que se pierden en el manto de tu piel
un instante eterno entre la humanidad
Diosa, diva, la musa de la mujer.