UN GRAN ROMANCE
La tierra y el mar eran vecinos
que de vez en cuando platicaban.
-No sé, amigo mar- dijo la tierra un día
-pero me siento en verdad decepcionada:
en mis espacios a los árboles he dado
sitios para juntarse y hagan bosques,
y en esos bosques, sabrás, he permitido
que vivan aves, cuadrúpedos, gusanos
y por las noches murciélagos y buhos.
A todos proveo de alimento y sustento
para que puedan desarrollar felices vidas.
¿Y crees, mar, crees que alguien dice:
"Gracias te damos amada Madre Tierra
por la forma en que nos colmas con favores?"-
Sonrió el viejo mar, y con melancolía.
-¿Que me cuentas, amiga, que me cuentas?
En mis honduras son bienvenidos los corales
miles de helechos, anémonas cual flores.
Si quieren frío les doy hielo a los pingüinos
¿Desean calor los tiburones? Brindo aguas tibias
las ballenas usan ambos con caprichos.
Caballitos, medusas, salmones, feos pulpos
¡Ah sí, para comer todos son buenos!
¿Pero para dar gracias?...Colección de ingratos.-
Siguió su perorata el mar, hacia la tierra:
-Pero no creas Tierra, que eres ignorada
Desde lejos he visto la sinuosidad de tus montañas
y esos fantástico volcanes que tu tienes ¡Ave maría!
Deslizando mi vista entre tus valles he logrado..
¿Cómo decirte? Bueno, he admirado tus cañones
¡Qué diera, bella Tierra, por hacerlos míos!-
Sonrojó la tierra y hubo erupciones
y después de recobrarse dijo al vasallo de Neptuno:
-A decir verdad, amigo Mar, también te he observado:
desde mis acantilado rielar la luna sobre tus aguas,
las puestas del sol a tus espaldas ¡Son tan bellas!
Y tus amaneceres con tintes tan cambiantes.
¿Sabes una cosa, amigo mar? ¡Eres tan guapo!
Enlazaron los enamorados los dedos de sus manos
en los deltas del Mississippi, el Orinoco y al otro lado,
En el Támesis, el Nilo, el Nilo y en el Ganges.
-Te daré un regalo- dojo el mar -esta bahía-
-Entonces tu me aceptarás un par de cabos-
-Toma este golfo- -Y tú esta península-
-Te doy caracolitos- -Y tu redondas piedrecitas-
Desde entonces la tierra y el mar han sido amantes.
El la acaricia dos veces cada día con mareas altas
y fertiliza tiernamente sus arenas con espumas.
Le lleva focas, ella gaviotas
le obsequia morsas, la Tierra da pelícanos.
Pero hay momentos en que él quiere poseerla,
con incontrolable pasión hacerla suya:
Se arroja con tifones, huracanes y la cubre
en grandes extensiones con ansia la inunda.
La tierra sunisa le lleva aguas dulces
pero el mar, es sabido, es saleroso y las cambia.
Los terremotos son la tierra estremecida en éxtasis
Las olas son el mar que incansablemente,
día y noche, mañana y tarde sin parar
en sensual ritmo de ir y venir
hace el amor a su adorada tierra.
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PRECIOSAS SON TUS LETRAS, AMIGO RAFAEL
Y HERMOSA ES LA AVENTURA QUE DESCRIBES DEL ROMANCE ENTRE
MAR Y TIERRA
ELOCUENTE, AGRADABLE...
Bendiciones incesantes
HERMOSA ANALOGÌA ENTRE LOS SERES HUMANOS Y LA NATURALEZA...LA TIERRA Y EL MAR...EL HOMBRE Y LA MUJER....ROMANCE EN SENTIMIENTOS COMO EXPRESIÓN POÉTICA DE TU SER!!!..
BELLO APORTE!...FELICITACIONES!
ABRAZOS,
ELCIRA
Poético y excelente poema, gracias poeta.
Saludos
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
http://organizacionmundialdeescritores.ning.com/
CUADRO DE HONOR
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