200 AÑOS DE INDEPENDENCIA ARGENTINA

[Marita Ragozza]

 

INDEPENDENCIA ARGENTINA

Y  fue un martes, día soleado de un 9 de Julio de hace doscientos años,  los argentinos nos declaramos independientes, con la importante influencia del General  José de San Martin, el General  Manuel Belgrano y el General Martin de Güemes quienes insistían que si no nos pronunciábamos  como país soberano  no podíamos responder a los deseos de libertad de una forma seria, seríamos tomados como rebeldes al rey de España, un grupo fuera de la ley.

 

Y así viajaron los diputados quienes elegidos por los vecinos y con facultades  para actuar, comenzaron   a sesionar un  24 de Marzo. En el glorioso 9 de Julio desde las 9 de la mañana estuvieron reunidos y a las 14 horas se redactó el Acta en idioma español, quecha y aymará

 

¿Y el rol de las mujeres de ese 9 de Julio de 1816?

Tenemos que ubicarnos en el papel que la sociedad nos tenía. El historiador argentino Daniel Balmaceda, un gran buscador de documentos, nos cuenta que las mujeres de entonces fueron activas, con gran carisma, ofrecieron pertenencias para financiar gastos y principalmente entregaron hijos a quienes educaron para el patriotismo.

 

Además - siguiendo a Balmaceda- las mujeres eran las que obtenían importante información, y así las devolvían en mensajes, mejores que cualquier espía.

 

Se nombra a Magdalena Güemes  de Tejada, apodada “Macacha” hermana del General Martin de Güemes que atemperaba los conflictos con su intervención conciliadora como también  a Remedios de Escalada, esposa del General  José de San Martin quien ,  en ese Julio de 1816,  se encontraba embarazada.

 

Son conmovedoras las noticias que,  por ejemplo, nos envió el Dr. Kahan contando cómo se celebró en Israel esta fecha, que es considerada la más federal y de mayor trascendencia, con esa interpretación gloriosa de una de las canciones más emotivas: “ No llores por Mí, Argentina”, la cual compartí en UHE.

 

Hace 200 años, en una casa de familia, se declaraba la independencia. Era una casa de familia, una casa que generosamente, Doña Francisca Bazán, prestaba para las reuniones del Congreso… una casa prestada… la independencia se declaró en una casa prestada!

La casa era prestada, y como no había ningún salón lo suficientemente amplio para las reuniones, hubo que voltear paredes para que todos pudieran entrar… para que nadie se quedara afuera.

 

Hoy, a 200 años de la declaración de la independencia, le debemos a aquellos congresistas, una Patria independiente, sin muros que separen, en paz y unidad, sin exclusión.

 

 

 

 

[Vilma Lilia Osella]

GRACIAS Marita por recordarnos nuestros orígenes.

Bendiciones.

Espero estés bien.

Vilma Lilia

[Delia Pilar Checa]

Muy hermoso este texto que nos compartes, Marita.

Un gusto leerte. Gracias.

[Miriam Inés Bocchio]

                                                    VIVA LA PATRIA!!!!!!!!

[Eladio Rodulfo González]

Te felicito por la belleza del texto donde explicas claramente los inicios de la independencia de tu país. Lamentablemente en Argentina nació un Juan Domingo Perón, que destruyó la economía de esa Nación, y en Venezuela un teniente coronel Hugo Chávez Frías que hizo lo mismo y dividió a los venezolanos. Yo conocí en Guayaquil el monumento de San Martín y Bolívar con motivo de la entrevista que ambos libertadores tuvieron en esa maravillosa ciudad. Un abrazo desde mi bella pero tiranizada VENEZUELA.

[Federico Landaeta]

Estupenda crónica que exalta la importate participación de la mujer argentina en el proceso libertador

Gracias por tan importante aporte, amiga Marita

Bendiciones incesantes

[Vilma Lilia Osella]

Linda crónica, Marita. La comparto.

Vilma Lilia

[ADELAINE SOTO ALVAREZ]

MUY INTERESANTE Y BIEN CONSTRUIDO. GRACIAS POR COMPARTIRLO, UN ABRAZO

[Alejo Urdaneta]

Grsndeza y sencillez en un acto de tal magnitud. Fue - y serà siempre - èse el valor de hombres, mujeres y hasta niños, en la casa de Doña Francisca Bazàn, dispuestos a entregar su voluntad y ser ùtiles en la sociedad.

Esa casa prestada no tenìa ornamentos de artificio sino la clara verdad de una proclamaciòn de indepenencia del pueblo argentino  No era necesario el ruìdo de trompetas ni los colores chillones de una feria. Estaba la concentraciòn de muchas voluntades en aquella màgica reuniòn.

Celebro con todo el hermano pueblo argentino la evocaciòn de un suceso trascendental.

Y en tus serenas palabras puedo percibir  el escalofrìo de un rezo.

Un abrazo.

Alejo

[Elias Antonio Almada]