Amor en el huerto

[ELISAIN MALDONADO]

Un tomate rojo, de piel encendida, se enamoró un día de una manzana florida. Secretos al viento, hojas que bailaban, historias de amor en el huerto contaban.

La manzana, brillante, de rojo carmín, miraba al tomate con dulce esplendorín. En un rincón del jardín, se encontraron, y entre hojas y ramas, su amor declararon.

Pero un limón amargo, de piel arrugada, se oponía a este amor, con fuerza airada. "¡No pueden estar juntos, es un desatino!" gritaba furioso, su corazón mezquino.

El tomate, valiente, sin miedo al limón, decidió luchar por su gran pasión. Con palabras dulces, su amor defendió, y con ternura y firmeza, al limón venció.

El huerto celebró, la paz se restauró, y el amor entre el tomate y la manzana floreció. Bajo el sol dorado, juntos se mecían, y en sus corazones, la eternidad vivían.

Bajo el cielo azul, brillando en su esplendor, el tomate y la manzana vivían su amor. Las aves cantaban, las flores sonreían, y en cada rincón, la dicha compartían.

El limón, ahora sabio, comprendió la lección, que el amor verdadero no conoce opresión. Se disculpó sincero, con corazón abierto, y la armonía reinó en todo el huerto.

Los días pasaban en dulce melodía, el tomate y la manzana, felices cada día. Compartían secretos, sueños y canciones, tejiendo juntos bellas ilusiones.

El huerto entero se llenó de alegría, con la unión del tomate y la manzana, pura poesía. Frutas y verduras en festín danzaban, y la brisa susurraba amores que se eternizaban.

[Elias Antonio Almada]