No sería igual si no estuvieras a mi lado en la palabra.
No sería lo mismo caminar la plaza sin ver tu árbol
aquel fundacional donde las aves habitaron tu regocijo
aquel del génesis de tu vida que se comporta tan verde
como juncos descubiertos como el espejismo de las orquídeas
como nido de pájaros canoros y lluvia que desmenuza sus goteos.
No sería igual Carlos Hugo sin tu Betty tu Carlitos tu Juanjo
y las chicas como transparentes lianas que ataron tu vida a nietos
a otras vidas cuentas de un gargantilla de júbilos
que originan el sumario añil de tus mañanas.
Y esas palabras enhebradas en versos con la avidez de la sed
fluctuando en tu garganta naciendo en tu labradora voz
despuntando la música del poema sublime como nutrido pámpano
de redondas uvas devenidas en licor báquico derramado.
No sería igual para mí el camino sin tu presencia viva sin esa paz
que emana de tus párpados entornados en ensueños peregrinos
sin tus enfados de coya testarudo sin tus jardines andinos
sin tus incógnitos destinos de cazador de texturas y misterios.
Sigo saboreando el dulzor de la papaya y oliendo el humeante café
en tu cálida mesa mañanera donde lanzas tus tramas incorpóreas
y le copias la música al viento para preparar la clara marinera.
En noche de luna llena paseas tu húmedo pespunte por tus jardines
y como vara que toca el aire te presentas diáfano
para transmutar el espacio y un libro nace cuyas páginas
destilan las leyendas de tu pueblo hablan del amor de la sustancia
de la mujer y del estío que te espía para transformar en nácar los colores.
Carlos Hugo ya nada es igual después de que tu vara y tu cayado tocaron mi aire
de poeta y me dieron espacio núcleo arco iris tejido en las palabras.
Dios que todo lo ve sabe estas cosas. En realidad poeta el arco iris es el espía
de mi vida el que anuncia el que cuenta el que todo lo enciende.
No es como al principio es otra cosa. Es una llama votiva de mutuas confidencias.
Un niño soñando un ángel bondadoso. Una mujer tocando el mar y ese exacto día
cuando con letras hicimos historia sin saber quién es el duende de las cosas.
Vilma Lilia Osella
Comentario
Me encanta que compartas el sentir hacia ese amigo del alma que es Carlos Garrido Chalèn.
Se lo debería afirmar más que lo que abarcan mis humildes palabras porque él nos ha dado
mucho al crear està cálida casa.
Vilma Lilia
Con tu permiso, Vilma, podría también decir cada miembro de UHE: "No sería igual si no estuvieras a mi lado en la palabra.". Carlos es el fundamento, la raíz, el vuelo, el nido de todos los que escribimos en esta Casa, UHE, fundada como espacio diferente, de paz, consuelo, alegría y amistad.
Carlos es la llama votiva de UHE.
Felicitaciones, Vilma y cariños a ambos.
Un hermoso mensaje de gratitud,
de dulce fraternidad
y de diáfana amistad.
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
http://organizacionmundialdeescritores.ning.com/
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