Educación y fraternidad

[Francisco Martins Silva]

La educación es el camino que todos en esta vida estamos llamados a recorrer.
Promueve el más alto grado de formación humana.
Constituye los cimientos que sustentan y dignifican la vida de las familias.
Surgió como una providencia divina para que en el plano terrenal todo hijo de Dios pudiera gustar la gracia de la sabiduría.
Dios implantó escuelas en el plano terrenal para que la educación tuviera su altar consagrado.
Y desde niños, jóvenes y adultos, todos podían buscarlo y encontrarlo.
Está blindado con poderes del más alto grado de discernimiento, aprendizaje y conocimiento.
Se dirige principalmente a las familias,
Y los niños están entre sus mayores afectos.
Sabe encantar la naturaleza de los jóvenes y orientar la vocación de cada uno. Es la cuna que acoge y nutre a la juventud.
Es experta en guiar el destino de quienes la buscan.
Por tanto, todos los profesionales de la educación somos seres iluminados.
A partir de ellos, un foco de luz de cada mente y corazón se hace rebosar por toda la sociedad.
Que todos los profesionales de la educación se inclinen ante el altar del Señor Dios de la Creación en alabanza y agradecimiento.
Que todas las familias bendigan al Señor por la educación.
Que todos los gobernantes, líderes de todas las naciones honren la educación.
La educación tiene colores, tiene sonidos, tiene voz, tiene espíritu y tiene luz.
Es como si los 7 colores del arcoíris se mezclaran para promover el más hermoso de los colores,
Y las 7 notas musicales en combinación mutua te dan el sonido más hermoso,
Y los coros de ángeles y arcángeles inspiraron el tono más alto.
Ella está agraciada por los 7 dones del Espíritu Santo para promover la paz en la tierra.
La educación nos recuerda los evangelios de Jesús, solo nos enseña el bien y el amor.
Es amiga íntima del universo, del planeta tierra, del sol y de las estrellas.
Por eso ilumina tanto la vida de los seres humanos.
La educación promueve la democracia y la inclusión.
A través de ella se realiza la política más humana y justa.
La educación es un patrimonio de la humanidad.
A través de ella el mundo se renueva y recrea.
Viva la EDUCACIÓN.

Educação e fraternidade

 

A educação é o caminho que todos nesta vida são chamados a percorrer.

Ela promove o mais alto grau da formação humana.

Constitui os alicerces que dão sustento e dignificam a vida das famílias.

Ela surgiu como providência divina para que no plano terreno cada filho de Deus pudesse saborear a graça da sabedoria.

Deus implantou no plano terreno as escolas para que a educação tivesse o seu altar consagrado.

E desde crianças, jovens e adultos, todos pudessem procurá-la e encontrá-la.

Ela é blindada de poderes do mais alto grau do discernimento, do aprendizado e do conhecimento.

Ela tem como alvo principal as famílias,

E as crianças estão entre os seus maiores afetos.

Ela sabe se deleitar com a natureza dos jovens e nortear a vocação de cada um. É o berço que acolhe e acalenta a juventude.

É perita na condução do destino de quem a procura.

Por isso, todos os profissionais da educação são seres iluminados.

Deles, um foco de luz de cada mente e de cada coração se faz transbordar por toda sociedade.

Que todos os profissionais da educação se curvem diante do altar do Senhor Deus da Criação em louvor e agradecimento.

Que todas as famílias bendigam ao Senhor pela educação.

Que todos os governantes, líderes de cada nação honrem a educação.

A educação tem cores, tem sons, tem voz, tem espírito e tem luz.

É como se as 7 cores do arco-íris se misturassem para lhe promover a mais bela das cores,

E as 7 notas musicais em combinação mútua lhe dessem o mais belo som,

E os coros de anjos e arcanjos lhe inspirassem o mais elevado tom.

Ela é agraciada pelos 7 dons do Espírito Santo para promover a paz na terra.

A educação nos lembra os evangelhos de Jesus, só nos ensina o bem e o amor.

Ela é amiga íntima do universo, do planeta terra, do sol e das estrelas.

É por isso que ela ilumina tanto a vida dos seres humanos.

A educação é promotora da democracia e da inclusão.

Por meio dela a política mais humana e justa se concretiza.

A educação é patrimônio da humanidade.

Por meio dela o mundo se renova e se recria.

Um viva a EDUCAÇÃO.

Francisco Martins Silva

Uruçuí/Piauí/Brasil

[Elias Antonio Almada]