Hacia la paz:
Acá en el Sur la paz viaja entre los pliegues
de una soledad borrosa.
Hay crispación entre seres desdibujados
por la injusticia. Barcos que parten con barriles
de agua dulce que nos roban. Valijas de procedencia
confusa y destino incierto. Dolientes minerales
que se explotan lacerando la Pacha Mama.
Escobas que barren jeringas descartadas
y tristes jóvenes de mirada dormida
que sienten el látigo doliente de la muerte.
Ancianos robados golpeados saqueados.
Y niños perdidos en la perversión de los sátrapas.
Hay memoria de gente desaparecida por diferenciarse.
Voz lejana y presente. Odio cruzado ávido del agua viva
que restañe viejas heridas y deseo de salir del martirio.
Y hay un gesto hecho sonrisa que cosecha las mieses
rubias sin distancia. Hierro devenido
en resonantes aparatos generadores de nuevos rumbos.
Poetas que sueñan y un mar que lame las costas de una tierra fecunda.
Cerros y montañas que protegen y ríos que nacen y vuelven.
Acá en el sur espejo de miradas y de gritos hay energía.
Se defienden las horas de trabajo se pelea por avances.
Se vivifican las ansias se busca la verdad entre testimonios.
Y el grito se hace raíz de libertad. Un grito que cabalga la llanura
en la pampa en los humedales en la música en el verso.
Y una zona de luz cubre las sombras.
Alumbra el discurso entrecruzado
buscando la esencial morada la justicia la verdad
la sal de la vida que le de gusto a la Fe a la Esperanza.
Acá en el sur hay un viento que rescata la sílaba primera.
Vilma Lilia Osella
Hacia la paz:
Acá en el Sur la paz viaja entre los pliegues
de una soledad borrosa.
Hay crispación entre seres desdibujados
por la injusticia. Barcos que parten con barriles
de agua dulce que nos roban. Valijas de procedencia
confusa y destino incierto. Dolientes minerales
que se explotan lacerando la Pacha Mama.
Escobas que barren jeringas descartadas
y tristes jóvenes de mirada dormida
que sienten el látigo doliente de la muerte.
Ancianos robados golpeados saqueados.
Y niños perdidos en la perversión de los sátrapas.
Hay memoria de gente desaparecida por diferenciarse.
Voz lejana y presente. Odio cruzado ávido del agua viva
que restañe viejas heridas y deseo de salir del martirio.
Y hay un gesto hecho sonrisa que cosecha las mieses
rubias sin distancia. Hierro devenido
en resonantes aparatos generadores de nuevos rumbos.
Poetas que sueñan y un mar que lame las costas de una tierra fecunda.
Cerros y montañas que protegen y ríos que nacen y vuelven.
Acá en el sur espejo de miradas y de gritos hay energía.
Se defienden las horas de trabajo se pelea por avances.
Se vivifican las ansias se busca la verdad entre testimonios.
Y el grito se hace raíz de libertad. Un grito que cabalga la llanura
en la pampa en los humedales en la música en el verso.
Y una zona de luz cubre las sombras.
Alumbra el discurso entrecruzado
buscando la esencial morada la justicia la verdad
la sal de la vida que le de gusto a la Fe a la Esperanza.
Acá en el sur hay un viento que rescata la sílaba primera.
Vilma Lilia Osella
Comentario
Hermosas palabras Vilma,lástima que no es solo en el sur sino en el país entero donde se grita.JUSTICIA,TRABAJO,IGUALDAD.
Abrazos de Ines Ine
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
http://organizacionmundialdeescritores.ning.com/
CUADRO DE HONOR
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