La Diaguita

[amir ibn tawfik simon]

Alla,

por agrestes laderas que bajan,

desde la cordillera a la costa,

viene caminando la joven diaguita,

arreando una manada de guanacos,

su rostro quemado por el sol,

mejillas sonrojadas,

semejando rojas manzanas,

ojos cual aceitunas, mirada timida,

larga cabellera negra,

remodilado por el viento cordillerano...

 

Ella tararea dulces canciones,

que nacen de su virgen corazon,

canta al paisaje,

recita a la vida silvestre,

interpreta el lamento,

del ardiente desierto atacameño-

mientras pastan los animales en el portezuelo.

 

Teje trabajando laboriosa ,

entregada con amor a su habilidad,

que los dioses le enseñaron cuando niña,

los espiritus de sus antepasados se señorean,

cuando bajan a la tierra ,

una vez al año.

  

La tarde enciende las nubes,

pintandolas de color arcoiris,

mientras la joven diaguita,

va uniedo la manada de guanacos,

alineandolas ordenadamente,

comenzando el descenso,

retornando al hogar,

antes que las sombras cubran el paisaje,

y la helada, cale sus jovenes huesos.

 

 

 

[e-mail]

reg.n° 4244 dibam.cl

stgo.9.5.2016.

 

[Miriam Inés Bocchio]

[Elias Antonio Almada]