Ávida y puntual fue mí llegada al altar,
Donde ella, se encontraba, reposada, sobre impecables manteles blancos,
Como divina y voluntaria ofrenda a este apetito hecho fogata.
Estaba hermosamente expuesta y dispuesta a ser ungida por mis labios
Y a ser deshojada ardientemente entre mis brazos.
La tomé suavemente,
Recorrí con el órgano más inquieto y sensual de mi cuerpo, cada parte de su rosada ofrenda,
Como queriendo encontrar un tesoro por siglos enterrado.
Luego, decidí usar en este rito bendito de la tarde que ya muere, mi sacramental daga para llegar Hasta el centro mismo de su sed en celo; lugar invicto, desnudo de prejuicios
Que ante mí se estremecía en llamas.
Cual insurrecto y tierno sacerdote, me interné en el campo ofrendado,
Para tomar posesión del estrecho y rosado huracán de sus pasiones.
Fui un amante, erecto de ternura, que supo abrir con dulzura
Sus blancas y torneadas columnas para entrar dócilmente a su santuario,
Tibio, secreto y de fragancias inundado.
Cual sumisa y abierta rosa de la tarde, navegó ansiosa
Por la inmensidad de mis sueños, siendo a la vez, suma sacerdotisa, poderosa diosa
Generosa y voluntaria ofrenda.
Escudriñó dulcemente en mis secretos y se alimentó de mis más atrevidas fantasías.
Su entrega fue limpia y total.
Fue desnudo capullo, sagrado cáliz, licor divino, ansiada ambrosía entre mis brazos,
Devolviéndole la vida a quien estando desterrado, muerto lo creían.
Nuestra antorcha antes de culminar su misión, bajo a la profundidad de los infiernos
Y subió a los cielos, liberando pasiones, deseos aguijoneados, fantasías estancadas
Y tímidas emociones que hasta la vez,
Se mantenían enclaustradas entre el silencio de mi pellejo y la prisión de mis huesos.
En esta noche, que a mitad se encuentra, sus rosadas columnas continúan izadas al viento
Para luego descansar satisfechas sobre mis hombros, ávidos de sostenerlas.
Van llegando los tiempos, se nublan las razones, se estremecen las paredes, gime el lecho,
Discurren sudores como olas, hasta que al fin llegamos a la cúspide para encender la flama eterna
Y plantar la bandera de la victoria que marca el fin de este ritual en llamas.
Misión cumplida Afrodita, puedes continuar viajando en tus olas de semen sagrado, hasta el olimpo.
Comentario
ok, lo haré
Buen trabajo,, reitero mi recomendación que leas las reglas sobre la cantidad de publicaciones diarias de blog
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
http://organizacionmundialdeescritores.ning.com/
CUADRO DE HONOR
########
© 2024 Creada por MilagrosHdzChiliberti-PresidSVAI. Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de SOCIEDAD VENEZOLANA DE ARTE INTERNACIONAL para agregar comentarios!
Únete a SOCIEDAD VENEZOLANA DE ARTE INTERNACIONAL