MI PADRE EL INMIGRANTE, DEL POETA VICENTE GERBASI.

[Alejo Urdaneta]

Vicente Gerbasi

El poeta venezolano Vicente Gerbasi escribió un poema extenso en honor a su padre. El título es: Mi padre el inmigrante. Su ascendencia era italiana y el padre vino a Venezuela para establecerse por siempre, llevando una vida sencilla en el campo. Su hijo Vicente Gerbasi ha sido reconocido en el mundo de la poesía y ha recibido el premio nacional de literatura de Venezuela. Ya el poeta murió pero nos dejó su hermosa obra, sobre todo el poema dedicado a su padre el inmigrante.
He aquí el primer canto:


Venimos de la noche y hacia la noche vamos.
Atrás queda la tierra envuelta en sus vapores,
donde vive el almendro, el niño y el leopardo.
Atrás quedan los días, con lagos, nieves, renos,
con volcanes adustos, con selvas hechizadas
donde moran las sombras azules del espanto.
Atrás quedan las tumbas al pie de los cipreses,
solos en la tristeza de lejanas estrellas.
Atrás quedan las glorias como antorchas que apagan
ráfagas seculares.
Atrás quedan las puertas quejándose en el viento.
Atrás queda la angustia con espejos celestes.
Atrás el tiempo queda como drama en el hombre:
engrendador de vida, engendrador de muerte.
El tiempo que levanta y desgasta columnas,
y murmura en las olas milenarias del mar.
Atrás queda la luz bañando las montañas,
los parques de los niños y los blancos altares.
Pero también la noche con ciudades dolientes,
la noche cotidiana, la que no es noche aún,
sino descanso breve que tiembla en las luciérnagas
o pasa por las almas con golpes de agonía.
La noche que desciende de nuevo hacia la luz,
despertando las flores en valles taciturnos,
refrescando el regazo del agua en las montañas,
lanzando los caballos hacia azules riberas,
mientras la eternidad, entre luces de oro,
avanza silenciosa por prados siderales.


Este es el primer canto del poema: Mi padre el inmigrante, de Vicente Gerbasi. Canoabo, Estado Carabobo, Venezuela. 1913 - 1992.
Lo presento con orgullo.
Alejo Urdaneta. Caracas, Venezuela.

[N€nf@___Nancy Beatriz Fuentes]

El tiempo que levanta y desgasta columnas,
y murmura en las olas milenarias del mar.
Atrás queda la luz bañando las montañas,
los parques de los niños y los blancos altares.

Me emocionó leerlo, lo entiendes y sabes como duele cuándo eres emigrante aún en tu patria.
Gracias fue un placer leerlo.
Saludos

[Alejo Urdaneta]

Gracias, querida amiga, por tu sensible palabra de poeta. Es nuestra tarea reacatar a nuestros artistas: músicos, poetas, pensadores. Vicente Gerbasi fie un gran poeta y su obra se ha sostenido a causa de los amigos que mantneien vivo su recuerdo. Si hasta Uslar Pietri se quejaba de que nadie en su país lo reconocía, salvo por sus programas de Valores Humanos. No se es profeta en la tierra propia.
Hagamos la tarea.
Un beso, alejo.
Puedes ver en Movimiento Venezolano que he puesto la obra de algunos autores nuestros, y sigo en el empeño.

Nancy Beatriz Fuentes dice:

El tiempo que levanta y desgasta columnas,
y murmura en las olas milenarias del mar.
Atrás queda la luz bañando las montañas,
los parques de los niños y los blancos altares.

Me emocionó leerlo, lo entiendes y sabes como duele cuándo eres emigrante aún en tu patria.
Gracias fue un placer leerlo.
Saludos

[Ma. Adiela Londoño de Copete]

Maestro Alejo, muy buenos días.

Cuando personas como Usted y otros poetas que destacan a sus coterráneos tan importantes como el gran  poeta Gerbasi, da gusto sentir el amor de patria.

Poema de una pertenencia y humanismo digno de imitar, bien por su hijo y amigos de la bella literatura.

Leer y sentir las palabras dicientes de tan bello poema es contagiar la luz de hermandad.

Excelente tarea en la cual Usted se ha empeñado; exaltar la memoria de tan importantes escritores.

Mil gracias por su aporte. Apoyando su tarea.

FELIZ FIN DE SEMANA, para Usted y los suyos.

Ma. Adiela.

[yenireé angélica]

me  emociona enormemente encontrar este cántico tan hermoso debo decir  que  si me anime a escribir, fue porque al escuchar uno de los cánticos del libro mi padre el inmigrante, comprendí que en la literatura y las metáforas podemos sacar los demonios que llevamos dentro, y expresar también alegrias, que no se pueden cifrar o simplemente explicar, como lo hace la poesía, todos somos trovadores...