EL MUCHACHO DE LOS OJOS ALTOS

[Javier Villegas]

El silencio es profundo, pero amo las
alturas. Hombres son y mujeres las
que alumbran mis ojos y mi voz esta
con ellas como el aire en que vives.

Washington delgado



El muchacho de los ojos altos,
el que tenía al sol, al viento
en la misma línea azul de sus pupilas,
un día renegó, se propuso conquistar el sol,
le imprimió vigor a sus deseos,
dejó de lado sus temores,
abrazó en su pecho azadones,
como si en ellos se gestara
la luz de las constelaciones.

Este muchacho que en el barrio conocimos,
comiendo cada día sus miserias,
mostrando al mundo la herida
profunda entre sus huellas,
un día se cansó de halagar a las muchachas,
de ensalzar sus caderas y sus formas,
de tocar los senos flácidos de las putonas,
comprar ropa de segunda,
comida de segunda
y de alegrarse medianamente a escondidas,
se miró hacia adentro
para examinar la vida en sus latidos,
descubrió en el fondo sus jardines,
sus rosas promisorias, la espada salvadora,
se abrazó a sí mismo,
abrazo al mundo en su memoria
y se marchó a las comarcas encendidas,
para abrazar la libertad, el aire
y el canto que teje la lluvia y las auroras.

El muchacho de los ojos altos,
se cansó de ver cómo se matan los deseos,
como la verja de la noche,
agobia cruelmente nuestros sueños,
como nos arrebatan el pan,
desde la boca encendida de los trigos,
cómo encarcelan a los hombres
que le cantan a la vida y a los amaneceres,
a la paz, a la soledad y a las muchachas.
Este muchacho llenó de alegría sus gemidos,
hizo ulular sus trenes escondidos,
partió por caminos ignorados,
no dudó, jamás lo hizo,
por la risa que fue perdiendo su sentido,
por el aroma que se hurtó a los geranios,
por el juguete negado a tantos niños.
No dudó, se fue sembrando sus latidos,
su palabra adhiriéndola a las piedras,
a los pájaros fue pintándoles sus sueños,
se fue sin hacer promesas a sus penas,
sin decir ¡Adios!, sin dejar para su regreso,
en el árbol de su casa, contraseña.


©JAVIER VILLEGAS (Lambayeque - Perú)
www.javiervillegasfernandez.blogspot.com
www.poemitas.com/cosicosas.htm

[MilagrosHdzChiliberti-PresidSVAI]

Buscando alejarse de la derrota se llega al borde de los sueño, marchando si volver las vista atrás.

Un poema de trazo sociológico-pragmático, que se sale del lote de los de Javier Villegas

[Javier Villegas]

Gracias Milagros por tu comentario. Este poema está inspirado en un amigo poeta TOMAS RUÍZ, que murió joven, a los 31 años, pero que simpre anduvo abrazado a sus convicciones, a la lucha por la justicia y a la poesía.