Sabrán que encontré este lugar y el me entrego el derecho de cantar en la puerta de estas paginas, que enseñan el derecho de expresar la luz del sentimiento en nuestras libertades y derechos de expresión. En la alegría esa que suspire al ver el camino de las letras hacia Guatemala, nació esta noche una voz que acá envió, y estoy publicándolo en este espacio Chapín. Lugar si, donde se que llegare a la mirada de usted, siendo así que quisiera dedicárselo a los cuatro puntos cardinales, donde se escuche suspirar la nostalgia por la patria.
Guatemala
Esta vez he llegado Guatemala, he llegado con mis ojos desde lejos, porque? No sé: es la costumbre de existir en la paciencia de otros pueblos. Ya el tiempo marca mas de los 40 años de mi ausencia, mas ahora que regreso con mi mirada, vengo encontrando tu sangre en un constante desborde en ríos, esos que navegan las corrientes de la vida.
Guatemala, muchas noches ausentes de tu presencia, he leído la tristeza que se escapa de las plumas de paisanos escritores, fue ahí donde supe que tu piel esta completamente destrozada; pues has sido apaleada, ultrajada, violada, acecinada, traficada por mercaderes muertos de hambre, que han vendido tu encanto por dinares miserables, engendrados por sangre y muerte. Te han vendido siempre al imperio que mejor paga. Te han vendido si, como un rosario de resurrecciones, que solo encuentran el engaño de la mano con el hambre.
He sabido que en esa vereda donde tu caminas, se perdió el sendero que alumbraría la huella, la misma si, que té aria encontrar la alegría pintada en los kilómetros, esos mismos que marcan las distancias que un pueblo camina, para así llegar con dignidad al final de la jornada con amor, trabajo, sentimientos, respeto al derecho ajeno, respeto a libre expresión del pensamiento, respeto a la existencia humana, y esa educación, de esta pienso es la madre de los principios morales, que a través de su cultura, respeta y alivia los problemas que podríamos abordar, en el confronte con la vida, los que somos glóbulos de tu sangre.
Supe en las letras de la prensa diferente, que te han usado como una esperanza de políticos, esos que nacen de a montones, políticos corruptos si, ya que en ti encontraron su esperanza de sentarse en las sillas altas de gobierno, han dejado doblada tu espalda y desde ahí, gracias a la confianza de los Chapines, ciudadanos que marcaron su sufragio electoral, ese que les autoriza a los elegidos el derecho de crear iniciativas, y ponerles a trabajar para el buen futuro de la patria.
Mas todos aquellos que dirigieron y dirigen tus destinos, olvidaron y olvidan alimentar las alboradas que emergen de las escuelas. Porque es ahí, el lugar que enseña el cómo encontrar la huella esa que nos dirija a ese allá, donde los principios morales florecen como bostezos del alma. Es la educación la única muralla que puede sostener los causes del crimen.
Olvidaron el fundar, el crear: un simple presupuesto para esta causa de educar a nuestro pueblo, como mínimo doble de lo que a sido, para mantener unas fuerzas armadas que no sirven para nada, ya que no recuerdo que ellos peleen con ninguna otra patria extranjera, que ni si quiera han pensado invadir la Chapina patria Guatemala.
Lo único que la historia guarda en sus archivos, son los relatos verdaderos de masacres a nuestros Indígenas, a nuestros obreros, campesinos, profesionales, violaciones y asesinatos a mujeres, hombres, ancianos y niños, que su ilusión servia únicamente para buscar y encontrar la palabra libertad; la misma que bosteza el hombre, la mujer, el niño. Estas fuerzas se sabe, como las de otros hermanos de Latino América, en Guatemala: han sido únicamente protectores de corruptos funcionarios públicos, que son los que pisotean la esperanza de los sueños y de retorno les entregan un buen modus vivendi.
Desde los archipiélagos del sur de Chile, muchas veces recibí el eco de balazos, acecinando sin causa noble ni razón a los hijos de la patria, era la muerte pintando calles de dolores, callando la voz de los Indígenas, regando sangre en los cañaverales, 23 cabezas fueron encontradas en los cafetales de Coban.
Mi tristeza que hoy comparto con los vientos que llegaran a visitarte, no les entregue direcciones de pueblos diferentes, no los las quise compartir para nadie en especial, solo espero que en su paso por montañosas, volcanes, valles, barrancos, lagos y el camino de ríos, dejen una luz que llega de mis recuerdos, a ti madre besos de maíz, se que te extiendes como una sombra, al paraíso de los frijoles.
Recibe el abrazo de unos nietos tuyos, que tus mejillas nunca han mimado, ni el olor de tus madrugadas conocen, pero si extienden el sincero amor de un beso, que en los anos a crecido en el silencio de las arenas de Arizona, que noche a noche duermen con las estrellas, desde acá, es donde estos hijos míos me piden te diga Guatemala, que te aman desde lejos.
Sal Troccoli
Troccolisal@yahoo.com