Cual palomas descubrimos nuestros nidos
esperando el ocaso de la tarde
que vacilante esperaba a la luna nochera,
quería verla pasar sobre nuestros cuerpos
que extasiados se perdían tras la neblina.
Amado mio esperamos allí la última fogata
esa que apagaba nuestros cuerpos frente al mar
mezcla sabor a hierbas silvestres y al navegado
sureña bebida invernal que agoniza junto al sol
aquel licor que sembró de margaritas los silencios.
Quizás las olas ya no rugen como antes
no vienen a adornar los nidos de las golondrinas
ni las gaviotas, ni las palomas que antes nos miraban
susurran gorjeos en aquellos veranos
o en aquellas tempestades desde mayo.
Allí en ese rincón de Curiñanco los amantes eternizan
con amores furtivos , divinos pasajeros
con historias inventadas cual palomo austero
miro pasar la tarde , caen las nubes allí en el fondo,
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CURIÑANACO : lugar de la costa valdiviana que tiene kilómetros virgenes de playas y bosque nativo, mezcla de comunidades rurales, indígenas y pasajeros.
DISCULPEN ES CURIÑANCO...
Hermoso poema amiga María,
gracias por participar compartiendo tu arte.
Dios te bendiga...
BELLOS , GRACIAS , SALUDOS A USTEDES.
Los recuerdos se despliegan memorando el lugar con el mar y la fogata.
Inspiradoras imágenes. Felicitaciones.
LINDOS VERSOS, MARIA VIOLETA
Bendiciones incesantes
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
http://organizacionmundialdeescritores.ning.com/
CUADRO DE HONOR
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