El SEÑOR DON CUENTO

[Mary Flor Ramírez Barazarte]

EL SEÑOR DON CUENTO

Mary Flor Ramírez Barazarte

De un estante  de libros viejos y abandonados, ¡saltó! un señor gordo y desaliñado.  ¡Yo soy el señor don cuento! un  saludo a los presentes. Vengo a contarles una historia que me tiene    muy preocupado, sumamente preocupado  y con una voz  de tristeza y desaliento dice: ¡No es posible! que en las escuelas nos tengan  tan abandonados. Todos los demás libros también se manifestaron: Tú y los tuyos que son libros  de cuentos, ya los niños y jóvenes  no los toman en cuenta.  ¡Que diremos nosotros! Y de un estante destartalado, se puso de pie  un libro de castellano: Ya casi nadie me usa, no me quieren consultar, la profesora  pregunta ¿Qué es epíteto? y todos se molestan, no quieren investigar. En uno de los anaqueles de ésta olvidada biblioteca,  yacían   tres libros muy viejitos, que son tres tomos igualito, uno de ellos con desparpajo  interviene: Nosotros somos los poderosos, nuestra enseñanza es la matemática, nuestro creador fue don Aureliano Baldor y como nota curiosa les diré   que el  apellido Baldor significa: “Valle de oro”.

Al oír este comentario, el señor don cuento, emocionado interviene: ¡Vieron amiguitos, nosotros, nos sabemos, todos los cuentos! y los niños y los jóvenes no nos valoran como debe ser

 De otro lugar oscuro y recóndito de la biblioteca  sale muy cansado un texto de Geografía de Venezuela.

¡Ay! ¡Ay! a mí ni siquiera me ven  y sí les preguntas  las capitales  de los estados del país en que habitan,  casi todos se quedan callados,  muchos no saben que responder.   Tenemos que hacer algo,  dijo el texto de castellano. A lo que don cuento  le contestó: Ya sé, hablemos con el director, solicitémosle una audiencia.   Tomó la palabra un libro muy pequeño, que no había opinado, era  el libro de inglés:* I do not think the always busy not address it says there are more important  things to think about. No entiendo nada dice Pedrito, (un niño solitario que siempre le gustaba ir a la biblioteca a leer). El libro de castellano  le dice: ¿cómo vas a entender? sí ni siquiera el español  te lo sabes, menos que menos  vas a hablar una  lengua extranjera.  No,  lo que no entiendo,  ¡Dios mío! ¿Qué me está sucediendo? en esta biblioteca los libros hablan, yo sé inglés,  castellano,  matemática,  historia…

Efectivamente Pedrito  era el único niño en su escuelita, que se preocupaba por sus estudios  y lo tildaban de loco solitario.  Llevaba un record   de 20 puntos en todas sus materias. Se quedó muy quieto  observando, disimulando con un texto entre las manos, para poder escuchar la conversación de los libros. En ese momento se produce un escándalo, mucho ruido y voces en el pasillo  cercano a la  biblioteca, y el señor don cuento  dice: yo  me voy a acercar  para ver que está pasando. Y se asoma al pasillo  y oye a un grupo de maestro que conversan.

 La maestra Prica es la primera en tomar la palabra: ¡Ustedes saben la novedad! la biblioteca del plantel, la van a trasladar  a otro lugar,  ya que aquí los niños no le dan uso.

 El maestro Geomar: No importa, en realidad los libros que tenemos están muy viejos y deteriorados, ya no sirven para nada, la polilla se los está comiendo. Además con internet  ¿para que nos sirven esos libros feos?

 Al oír estas  severas críticas, el señor don cuento, entra a  la biblioteca sollozando de dolor y exclama ¡nos desprecian, no nos quieren! nos van a sacar de la escuela  y no sé si para un basurero, no escuché bien y todo por  la culpa del int…  ¡no lo digas! ¡Eso no es verdad!, una vocecita invisible  no permitió   que siguiera hablando.

El señor don cuento con lágrimas en los ojos le pregunta y ¿tú quien eres?  Sal de allí, no te escondas, cobarde,  da la cara. Tú sabes que digo la verdad, por ese invento los niños y jóvenes ya casi no nos toman   en cuenta  y yo me esmero para  ser un señor don cuento.

 Tienes una voz muy linda, pero da la cara cobarde   y el señor don cuento y todos los libros de textos se ponen a llorar.  

 

 

La vocecita  se escucha nuevamente. Yo soy la reina del internet, no lloren, yo entiendo su gran preocupación  y les digo algo, yo también me preocupo. Pero escuchen, es muy importante  y beneficioso el uso del internet, las computadoras, los programas ayudan  enormemente al estudiante, son rápidas  en ubicar y trasmitir datos. Mientras hablaba iba apareciendo de lo invisible a lo visible. Era muy hermosa, en su cabeza tenía ceñida una corona de antenitas,   su cuerpo estaba cubierto por una malla  gris plomo  y en sus manos reposaba un gran libro  digital,  donde realizaba sus anotaciones  de manera electrónica.

El problema que está sucediendo, en esta biblioteca también  ocurre    en muchos lugares en el mundo.  A cada  instante me llegan   a mi libro electrónico  el registro   de los usuarios que  no usan libros. Y por el contrario  las salas de internet viven repletas de niños y jóvenes  y esos reportes yo los tengo.  Pero nosotros no somos culpables, la tecnología avanza, debemos  de sentirnos orgullosos por ello. Los verdaderos culpables son los padres, que no enseñan a valorar el uso de los libros de textos, no le crean a sus hijos hábitos de estudios.

Todos los libros atónitos miraban  a esta reina y Pedrito  interviene, ¡eso es verdad! mi mami  desde que yo aprendí a leer, ella lo que hacía era comprarme libros y más   libros de cuentos.  Ahora me fascina leer   y por eso me llaman niño solitario.  Me quedo larga horas leyendo solito en este recinto. Es fascinante leer.  A todas estas sé oye otro alboroto. Vienen con grandes cajas a llevarse los libros. Y  un grupo de niños que también observaban todo lo que estaba ocurriendo,  se sintieron muy apenados y  ellos mismo hablaron con los directivos  de la escuela y no permitieron  que cerraran  la biblioteca. Al cabo de una semana,  los libros se sentían felices entre las caricias de las manos de los niños. La biblioteca fue remodelada y los libros restaurados.  Dentro de la biblioteca habilitaron seis computadoras, y los niños  aprendieron a valorar  ambas cosas, la importancia de la tecnología   y  a amar y cuidar a los libros.  Pedrito ya no estaba solo en la biblioteca. De repente recordaba y pensaba en la reina del internet. Y el señor don cuento le dice: Pedrito hoy aprendí una gran lección y esa lección es que todo y todos somos importantes en la vida y debemos tolerarnos y respetarnos,  ya no me caen mal  la señorita  computadora  ¡ah perdón! la Reina del internet. Ella le da una sonrisa desde  una de las pantallas  de las computadoras  que están utilizando los niños.  En la escuela reinó el equilibrio y la valoración a todas las cosas que  ha inventado el hombre para su crecimiento  intelectual.   

FIN

 *No lo creó,  él siempre está ocupado,  no atenderá,  él dice  que hay cosas más importantes  en que pensar.

 

 

[Mary Flor Ramírez Barazarte]

Gracias Gianina Piccioni tus palabras son muy importantes tienes mucha razón en lo que dices, Gracias amiga  por visitar mis humildes letras  un abrazooooooooooooooo

[Norma Cecilia Acosta Manzanares]

La lectura es primordial para abrir aun mas el entendimiento nos abre muchas ventanas da luz. gracias me encanto y me deleite en este maravilloso cuento. 

[maria alicia del rosario]

Querida Mary Flor!

Un gusto leerte realmente, buen guión...y mejor final. El compartir guiados por seres que se dediquen a ese logro, hará que todos nos sintamos mejor...Y qué bueno que los niños lo puedan comprender con estas historias..Besitos

[María Isabel Zelaya]

Muy buena la historia que cuentas! es para compartirla con los niños y reflexionar juntos...¡qué viva la lectura! los libros impresos y las computadoras bien pueden ser buenos amigos para todos!

[Mary Flor Ramírez Barazarte]

 Gracias por sus comentarios  he pasado mucho tiempo sin estar en esta hermosa página  gracias por su cariño y amistad 

 Gracias NORMA , Maria  Alicia Y Maria Isabel  ya tengo que irme me llama el deber . BESOSSSSSSSSSSSSSSSS Y MIL BEN¡DOCOONES A SUS  VIDAS