ARAMINTA/ El terrible caso de Araminta: Venezolana torturada y presa

[MilagrosHdzChiliberti-PresidSVAI]

El terrible caso de Araminta: Venezolana torturada y presa un año en el INOF sin audiencia preliminar

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ARAMINTA

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De vivir Andrés Eloy Blanco, Araminta sería su musa… Araminta González, la químico, la muchacha a quien sus torturadores del Cicpc golpearon y arrancaron el cabello para que confesara un crimen que jamás había cometido. A la que encerraron en el INOF hace más de dos años y que desde su captura no ha parado de sufrir tratos crueles e inhumanos. Araminta, la muchacha que se ganó una nefasta lotería y se convirtió en el blanco del ensañamiento de un régimen, que disfruta con morbo la mueca de dolor y terror de su rostro…, un rostro que se apagó por las tristezas y las injusticias.

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¿Recuerdan a Araminta: la joven químico a quienes unos patriotas cooperantes denunciaron y que en junio de 2014 fue detenida por una comisión del Cicpc que allanó su apartamento en Menca de Leoni buscando explosivos? Es difícil no recordar su caso porque ella es el testimonio de lo que es capaz este desgobierno y hasta dónde puede llegar su maldad. Su nombre salió a relucir otra vez hace pocos días. Como si se tratase de una limosna, se anunció para ella una medida cautelar, por razones humanitarias, con régimen de presentación. En un primer momento, cuando lo escuché, sentí alegría. Una alegría que se esfumó muy pronto. Araminta, desde hace cuatro meses, está recluida en un hospital psiquiátrico. El régimen la quebró. Sus cancerberas del INOF se ensañaron tanto en su contra que, no una, sino cuatro veces, Araminta atentó contra su vida. Su fortaleza y fe se fueron desvaneciendo con la sevicia, con cada tortura, con cada golpe, psicológico y físico, que recibió en su celda.

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La depresión severa que padece la sacó de la cárcel de mujeres, pero la condenó a una vida de miedo y fantasmas que la mantienen encerrada en la habitación de un psiquiátrico. Su lucha por la libertad, que también ha sido la de sus abogados defensores –José Vicente Haro y Pierina Camposeo– se ha visto empañada por la injusticia de un sistema viciado. Sus ganas de vivir fueron adelgazándose como su cuerpo, que ha perdido más de 30 kilos.

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Escucho a Haro y Camposeo relatar lo que ha ocurrido con Araminta en los últimos meses. Los oigo narrar cómo durante su reclusión fueron anulándola hasta llevarla al borde de la desesperación. Le prohibieron pintar, su único pasatiempo que la mantenía esperanzada. Le canjearon su Biblia –su refugio en momentos aciagos– por un jabón de baño para que pudiera asearse. La despertaban en la madrugada, varias veces, para someterla a vejaciones e inútiles requisas. La castigaron todas las veces en las que, envalentonada, quiso oponerse a los adoctrinamientos o a los malos tratos. Le difirieron la audiencia de presentación preliminar docenas de veces para dejarla allí, en un limbo jurídico e inhumano, desesperante, supeditado al capricho del juez asignado a su caso. Lograron hacerla sentir que solo la muerte la liberaría de tanto sufrimiento. Quizá la soledad de su orfandad la hizo pensar que el suicidio era la salida. Porque recuerden que Araminta es huérfana: durante estos dos años y medio que lleva viviendo estos horrores, ha dependido de la solidaridad de sus abogados, de algunas almas caritativas y de su hermana, que vive en España.

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A Araminta, el régimen la estranguló hasta volverla una piltrafa. Le destrozó lo que pudo haber sido una vida próspera y sin tropiezos. Le arrebató el amor por su profesión y le transformó su carrera en el arma que la condena. El régimen hizo con ella lo que ha hecho con Venezuela: llenarnos de miedo e intentar quebrarnos las rodillas. Porque Araminta es lo que ha sido el país en las manos de quienes nos malgobiernan.

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Me duele tanto Araminta. Me entristece saberla perdida en su miedo y anclada en el terror de sus dos últimos años. Desconectada de la realidad y de las posibilidades de una vida mejor. Alejada de un futuro en el que sus días en el INOF, los golpes y los mechones de cabello que le arrancaron sus torturadores, lleguen a ser tan solo un mal recuerdo. Duele escuchar a sus abogados decir que Araminta no quiere vivir. Que no recuerda lo que es ser una persona. Que olvidó que tiene derechos porque, a pesar del régimen, debería seguir luchando por ellos.

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Su caso me reconfirma que la maldad existe. Y que la gente cuando está en el poder –y no quiere soltarlo– puede llegar a ser muy cruel y sanguinaria. Pensemos solo por un instante en esta reflexión final: Araminta pudo ser cualquiera de nosotros. Su “suerte” –su muy “mala suerte” – pudo ser la de cualquiera de nosotros, la de cualquiera de ustedes que en este momento lee estas líneas. Porque ser el blanco de la ira del régimen no es difícil. ¿Cuántas Aramintas más conoceremos? ¿Cuántos presos políticos han atravesado su mismo calvario? ¿Cuántos están aún detrás las rejas esperando, como ella, que se demuestre su inocencia? Araminta es la Venezuela de hoy. Y si Andrés Eloy Blanco viviera, ya le habría escrito un conmovedor poema.

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JOSÉ DOMINGO BLANCO (MINGO) / @MINGO_13 DE DICIEMBRE 2016 - 12:05 AM

http://www.el-nacional.com/jose_domingo_blanco/Araminta_0_968903190...

[Elias Antonio Almada]

Cómo duelen tus letras. Mi solidaridad con Araminta.

[Eladio Rodulfo González]

Hay muchas Araminta sufriendo la crueldad de un régimen que le ha confiscado a los venezolanos todos sus derechos, hasta el de la vida, el más sagrado. El caso de Barulio Jatar es horrible. Se está muriendo en las prisiones comunistas por publicar un video sobre el cacerolazo que los pobladores de Villa Rosa (Urbanización construida por la democracia en el Municipio García del Estado Miranda) le propinaron al genocida de Nicolás Maduro, el colombiano que ha nacido en varias partes de Venezuela, declarado venezolano por una sentencia del Tribunal de Injusticia del país, malandros todos, como toda la élite del castro-chavismo-madurismo-militarismo. La verdadera justicia tarda pero llega.

[Vilma Lilia Osella]

Es inmensa la maldad humana, Jose Domingo.

Este relato conmovedor y tragico nos pone en compromiso de cuidar nuestra libertad.

Gracias por tu colaboracion.

Vilma Lilia 

[Iris Girón Riveros]

¡ Qué desgarrador es este caso de la joven Araminta !

Inconcebible que así puedan estar tranquilos, quienes la tienen atormentada.

¿ Por qué permite el Dios Poderoso que exista tanta ignominia?

No puedo contener las lágrimas leyendo este cruel relato.

Cuánto siento querida Araminta tu desolador caso.

¿Qué hacer?

Buscaré respuestas en mis plegarias y mi dolor...

[Luis Felipe Garzona López]

Qué malditos esbirros... engendros del diablo. Me partió el alma leer esto, Que Dios tenga misericordia de Araminta y de Venezuela completa. Los he tenido en el corazón.

[Venancio Ramón Castillo González]

Mil Gracias mi Querida Paisanita Milagros por compartir esta amarga realidad, escrita por José Domingo Blanco "Mingo" donde valientemente desnuda una más de las tantas aberraciones de este Gobierno corrupto y delincuente, que por eternizarse en el poder se ha convertido en un monstruo de mil cabezas, sin sentimientos y sin escrúpulos que entre tantos problemas, maltratos e injusticias, nos tiene a los Hermanos Venezolanos, al borde de protagonizar una triste e inconcebible historia que no fue escrita para nosotros y que irónicamente si nuestro Amado Padre Jesucristo no mete su mano sera una realidad para la complacencia y las intenciones de ellos, donde no habrá Vencedores !Solo Vencidos!, un Fraternal Abrazo, Dios te bendiga en unión de tus seres queridos. 

                                                                                                   

Venancio Castillo                                                                       

Cantante-Escritor                                                             

“Con el permiso de Cristo el Poeta del Amor”

Miembro Sacven Venezuela 

[ARIS ELIZABETH SEGOVIA MENECES]

Araminta es la Venezuela de hoy...

Sentada tras una reja

Araminta ya no hablaba

sus ojos llenos de lágrimas

su desdicha derramaban.

Suplicas por un instante

donde nadie la escuchaba

su refugio sobre el lienzo

sus manos eran su espada.

Cuanta tristeza le dieron

los pocos que la acusaban

era inocente lo juro

solo que fue desdichada,

por no decir la mentira

que muchos necesitaban.

 

Esta es nuestra realidad venezolana, un hermoso pueblo que lentamente va declinando en su desgracia, ante los ojos enceguecidos de un pueblo que no sabe qué hacer; si morir de brazos cruzados o sacar la espada y morir igual pero morir peleando la buena batalla.

[Alicia Mantaras]

No se como expresar lo que mi alma  siente...

es increible pensar en tanta maldad   

que ni siquiera se puede  decir humana 

porque de  humanidad   eto que hacen  no tiene  nada...

Saludos y bendiciones 

Alicia.

[MA. ADIELA LONDOÑO DE COPETE]

Me llama la atención esta sensible y aberrante historia.

Ella no puede sufrir más por que su corazón ha quedado paralizado por el horror, por que en su alma, el ángel de vida,

palideció de angustia y aunque su amor la acompaña, cada vez hay una lágrima nueva de tristeza.

Cuántas ARAMINTAS hay en el mundo?, Cuántas son Mártires y Santas.

Mi alma se deshila, se nubla y muere cada día en el sentir de estas heroínas que aparecen en el mundo como ejemplo de guerreras frente al obstinado ataque de la maldad de un terrible régimen.

Agradezco a Ti Milagros este triste más aguerrido compartir.

[Lucía Amanda Coria]

Hola: Este caso es uno mas de los que se insriben en  la pavorosa indiferencia de quienes aplauden a los regimenes totalitarios y los bendicen en lugar de censurarlos desde su espacio de poder. ¿Alguna vez< SU SANTIDAD EL PAPA JORGE BERGOGLIO, ALIAS FRANCISCO se intereso pór la situacion de esta martir?¿ Alguna vez en sus mensajes se refirio a la terrible situacion de los presos politicos en Venezuela? Sin embargo, se encarga de mandarles rosarios benditos a los delincuen tes, con probados actos de corrupcion que estan detenidos en Argentina.

[MARIA IRACI LEAL]

Dios mio, que caso terrible y cuanta maldad... Me comovió, no pude contener las lágrimas, querida y pobre Aramita, que muchos pueden ayudar y Dios sostenga a todos en esa tarea, gracias MIlagros, besos MIl desde Brasil.

[Edith Elvira Colqui Rojas]

Un caso muy lamentable de un régimen con ideas equivocadas.