Es muy dulce, en verdad, el pensamiento, cuando este recorre

Como en un sueño. Los caminos que cruzan al jardín de Edén.

Porque decir paraíso; es traer a los ojos del entendimiento la imagen santa de Dios,

Que inicio la vida en el mundo con la luz

Como el símbolo más claro de que Èl, es la vida.

Dios, que hizo brotar arboles de la semilla de su…

Esta noche en el que el sol no alumbra

y el tiempo se escuda en las manecillas del reloj.

Mi alma lo necesita y siente la necesidad

de apagar con palabras tanto silencio.

 Quizás sólo sea mi necesidad de ti,

 Si un día te dejo partir, no sería yo, no sería mi alma.

¡Amor¡ que palabra tan grande y qué…

Besos con sabor a fresa

Con la desnudez de un beso

Y con la inocencia de una flor.

Besos con suspiros de cereza.

 Labios de mariposa

Embriagados con jerez.

Beso desnudo, beso de pasión

Castillo de afrodita,

Besito de…

En tus ojos de mar azul,

Naufragó el barco de mi amor.

Embriagaste con tu fragancia mi corazón bohemio

Destilando uvas en sus labios de flor.

A lo lejos de la playa

Diviso el faro de tus ojos,

Que se aproxima como mariposa alada

Marchando con ella mi alma gitana

 …

Padre mío, hoy leí de nuevo la carta que escribiste en mí

Para que no la olvidara en toda mi vi vida

Las enseñanzas que me supiste dar.

Fuiste sabio, mi querido viejo, supiste tatuar el alma mía

Hoy lejos de ti te veo en la distancia;

Porque la nostalgia  no me permite olvidar

Viejo mío, como te extraño es vital tu…

Acropolis, cuna de Sofía

Templo sagrado de ciencia y virtud;

Entre neblinas y copos de nieve

Hoy te honro y te doy gratitud.

Dios te guarde mi escuela Normal.

Aquí estamos tus egresados

como símbolo de una hermandad

Evocamos altivos su nombre sagrado.

En el…

Dicen que eres prohibida y que tu amor me llevará a la tumba.

Dicen los expertos del amor que nuestra relación no puede ser;

en cambio yo, sin ser experto y desconociendo las leyes de los que se aman

que no es amor prohibido; porque mi corazón no me prohíbe amarte.

Te queda prohibido, no sentir los latidos de mi pobre y…