Elcira era una joven cucaracha esquimal que vivía a inmediaciones del Polo Norte. Esto no debe de extrañar a nadie, pues las cucarachas con su gran capacidad de adaptación, han vivido por más tiempo que el hombre sobre la faz de la Tierra y en todos los ambientes por inhóspitos que parezcan.
Para ella y sus conterráneas, ese mundo blanco y frío era todo cuanto existía. Con naturalidad veían al Sol desplazarse alegre alrededor del horizonte por largos seis meses y luego aceptaban con sencillez la llegada de la interminable noche polar. Lo normal.
Su alimentación, rica en proteínas, procedía del mar y en ella predominaba el pescado. Los osos blancos y otros animales de la región, a través de su accionar, les dejaban lo suficiente para su manutención y vivían tranquilas y felices.
Elcira creía que todo el planeta era igual, hasta que un día descubrió la magia del Internet y se comunicó con sus congéneres de otros países. De inmediato se maravilló al descubrir cosas nunca vistas, tales como playas de arena negra, paisajes multicolores, ciudades jamás imaginadas y mil cosas más. Empezó a soñar despierta con palmeras cargadas de cocos, con árboles verdes y llenos de frutos, así como con playas colmadas de luz y calor. De inmediato se le despertó el gusanito de la curiosidad y el deseo de conocer los lugares exóticos que la propia Red le revelaba y las costumbres que sus amigas virtuales le mencionaban.
Un día, abordó el primer trineo que tuvo a su alcance, encaminó sus pasos hacia Alaska y en el aeropuerto de Juneau abordó un avión que la condujo a las cálidas playas de Miami. Emocionada, ocupó el mejor rincón de la cocina de un hotel de cinco estrellas; en donde abundaban alimentos nunca soñados y de exquisitos sabores.
Durante el día, salía a recorrer las playas y los centros comerciales circundantes, y por las noches, los clubes nocturnos. Estaba feliz, pero al no estar acostumbrada al calor, regresaba al hotel exhausta y aunque había aire acondicionado, no era suficiente para sentirse cómoda. Así que para hacer más placentera su estadía, buscó el cuarto refrigerado de la cocina; en él, se fabricó un pequeño iglú y empezó a sentirse como en casa, con la única diferencia de que éste sólo era su centro de operaciones. Salía a hacer sus recorridos turísticos, degustaba de la amplia variedad de alimentos y bebidas, y luego, cansada, pero llena de entusiasmo, volvía a la frescura de su iglú. En sus recorridos conoció a muchas cucarachas nativas del lugar y a otras emigrantes de países latinos. Le agradó la variedad de acentos, modismos y costumbres, pues se trataba de una urbe cosmopolita que superaba las expectativas que le pintaba La Red.
Cuando con tristeza dio por terminada su aventura turística, abandonó su Polo artificial de cinco estrellas y regresó a su nieve natal. Desde ese día, fue la cucaracha más popular del gélido lugar; pues siendo la única que había viajado fuera de la región, tenía tantas cosas que contar, que hacía agradables las veladas en las largas noches polares. FIN
El que no conoce más allá de su hábitat, cree que todo el mundo es igual. Expande los horizontes de tu entorno. Cuando puedas, viaja y acrecentarás tus experiencias y tus conocimientos.
Luís Rojas Marcos (1943- ) Psiquiatra español: Viajar es una buena forma de aprender y de superar miedos.
Comentario
Querido sobrino nieto: Te siento tan cerca que me hacen falta tus visitas. Gracias por tu benigno comentario. Abrazos de maíz, Chente
Tio abuelo Chente cada dia te ganas más lo de abuelo, amén de sabio te veo en la santidad de compartir. Recibe mil bendiciones con respeto, alegría y amor fraterno.
¡Ay! Gracias por ese abrazo. Que fuerza tienes. Gracias por tu lectura y tus dulces palabras. Besos, Chente.
¿Por qué me gustan cada vez más tus letras amigo Chente? Me encantó leerte. Gracias por compartir tus amenos relatos llenos de sabiduría. Un abrazo que haga doler tus costillitas (con todo respeto, jaja)
Estimado José Ramiro: Gracias. Cordialmente, Chente.
Estimada María Beatriz: Eres muy amable. Besos, Chentelo.
Estimado Castor: Gracias por tus palabras. Un abrazo, Chente.
Estimado Jhonny: Gracias por tu visita y tu amable comentario. Feliz fin de semana, Chente.
Gracias amigo Vicente por regalarnos este hermoso, asertivo y aleccionador relato, en el cual se demuestra claramente que en la vida hay más que simplemente soñar, hay que viajar para hacer los sueños realidad.
Dios te bendiga...
RED DE INTELECTUALES, DEDICADOS A LA LITERATURA Y EL ARTE. DESDE VENEZUELA, FUENTE DE INTELECTUALES, ARTISTAS Y POETAS, PARA EL MUNDO
Ando revisando cada texto para corroborar las evaluaciones y observaciones del jurado, antes de colocar los diplomas.
Gracias por estar aquí compartiendo tu interesante obra.
http://organizacionmundialdeescritores.ning.com/
CUADRO DE HONOR
########
© 2024 Creada por MilagrosHdzChiliberti-PresidSVAI. Con tecnología de
Insignias | Informar un problema | Política de privacidad | Términos de servicio
¡Tienes que ser miembro de SOCIEDAD VENEZOLANA DE ARTE INTERNACIONAL para agregar comentarios!
Únete a SOCIEDAD VENEZOLANA DE ARTE INTERNACIONAL