POEMA Nº 18. ENTRE AROMA Y SABOR
AUTOR: E. VILLALOBOS
I
Dulce fragancia evocan los pechos
cuan manantial de aroma y sabor,
los que se esparcen en todos los tiempos
con la elegancia de un ruiseñor
II
Vibra la esencia cual pinceladas
entre los tonos de un gran pincel
donde se vuelca como la espuma
cada fragancia que siente una piel
III
Dulce la fruta que ensalza ese aroma
ese que emerge desde tu ser
que se transforma como la aurora
para embriagarse de tu querer
IV
Brillan los ojos, nace el amor
viene la gloria en gran verdor
y cuando todo yace en el tiempo
son tus aromas resurrección!
V
Dulce la fruta que ensalza en el cuerpo
esa que brota sin detener,
todo latido, todo sentido
y ve la cosecha en atardecer
VI
Luego de un tiempo
siente el sabor ese que queda al andar
por los caminos del peregrino
que como un niño vuelve a soñar
VII
Es una vida, que plasma el color,
como las olas del mar
y que al mirar en lo interior
se ve marcada por su sabor
VIII
Mirar el rostro de cada ser,
no por ser blanco o por ser miel
sino por brillo de su interior
aquel que cambia sin condición
IX
Se ven en los ojos de aquel que ama
y se transporta con ese amor
ese que siente vivir en gloria
que se percibe en su verdor
X
No es por su aroma, ni su color
es su sabor que invita al amor
el de la lluvia que con el viento
toca las notas del trovador
XI
Dulce la fruta que ensalza en tu piel
la que en la boca siente el placer
que con mis manos puedo comer
y con tu amor llena mi ser
XII
Son los degrades de su sabor
cuan manantial de un gran placer
ese que inspira desde lo ajeno
robar los celos de un corazón
XIII
Llega la gracia y la esperanza
de ver brotar esa pasión
la que se pierde entre las ramas
de la abundancia de un chupaflor
XIV
Como alimentos para la piel
como caricias para el saber
como sonrisas que deja el placer
son las fragancias de una mujer
XIV
No son naranjas, no son limones
son los colores que dan sabor
los que la vida brinda en amores
a quien no cierra su corazón