TRANSICIÓN...

Ya he enfermado a mis oídos,

no me digas nada de tu pasado,

que he cubierto muchas jornadas

entretenido con lo mundano

y los relatos que me has traído.

Dime verdades -sin engaños-,

donde crezca la amistad clara

para un futuro claro y diáfano.

Se han perdido por mis pulsos

aquellas palabras tiernas,

que una tarde me dijiste;

cuando yo era: el iluso

y las creí tan sinceras...

Más, cuando a la vida despiertas,

con los…

Ya han salido las pancartas,

que anuncian a los candidatos;

pues saben que son paridas

para muchos de sus ingratos.

No quieren ondear al viento:

esos nombres del fracaso,

que pusieron sin aliento:

muchos hechos del pasado.

Para no estar nunca contentos,

la chaqueta se cambiaron;

donde estuvieron inmersos

y es, que cuando pudieron,

no nos hicieron ni caso.

Muchos de ellos terminaron

de hacer sus buenos negocios

o quisieron…

Quiero volver a otros tiempos

donde crezca mi ilusión,

pues los que ahora llevo:

sólo producen dolor...

Como me pesa la vida

y de tanto sentirla pienso,

que no tengo porvenir

con mi amor entre tus dedos.

Eres dura cual reaní,

como una pesa de acero,

que te doblegas ante mi

y me atraviesas los huesos.

Lo que siento no lo sabes,

pues no me tienes modales,

ni tampoco lo que quiero

y no has sabido darme:

el consuelo, que yo…

Teuso dentro de la cueva...

Su tecnología no era muy refinada pero si era bastante preventiva, pues al llegar a las inmediaciones del agujero, no se pasó de ligero y estuvo un largo rato observando el lugar y la forma más propicia de investigar los resultados que podrían depararle, tanto si se acercaba demasiado, como si intentaba levantar algunas piedras y arbustos que habían proliferado por entre sus grietas.

Era imposible que el agua que entraba en los desbordamientos del…

LA FUENTE DE MARÍA GACHAS...: seudónimo = logaritmodeapi

Estaba escondida en un cahorro; pero miraba al sur entre los líquenes -siempre en movimiento-, que le daban buena sombra -cuando el sol caía a las tres de la tarde; pero su chorro cantarino, siempre se deslizaba desde una teja arabesca, que le servía de cauce desde tiempos inmemoriales y al caer sobre la roca reaní de su base: salpicaba todo el entorno y formaba una pequeña poza -siempre ondulante-, donde todos los animalillos…

ZUMBIDO...

NOTO EL ZUMBIDO DEL MAR,

COMO CASCOS DE CABALLOS,

QUE HACIA EL HORIZONTE VAN

AL GALOPE DE TU ENCUENTRO:

DERECHOS A NAUFRAGAR.

¡MIRA!: QUE QUIETOS ESTÁN,

PENDIENTES DE TUS ENCANTOS

LOS VELEROS EN ALTA MAR;

EMBRUJADOS EN TUS DESMAYOS

CON LAS BRISAS, QUE LES DAS.

YO ESTOY JUGANDO A LA VEZ,

Y NO, CON RULETA RUSA...,

ESTOY EMPEÑANDO ¡MUJER!

MI CARIÑO CON…

LA RAMERA...

¿A CUANTOS REPINTÓ TU HAMBRE...?

¡ SALPICÓN DE NECIOS TULLIDOS !;

LOS TONTOS:

¡QUE TONTOS FUIMOS!

DIFAMANDO TU NOMBRE...

¿SERÁ VERDAD...:

-QUE EL VIENTO INFAME-

LOCUAZ VA PREGONANDO

Y EN SU HUIDA, LAME

EL POLVO, QUE VAS DEJANDO?...

TU FIGURA ES SOMBRA OCULTA,

MANJAR DE FALSOS TIRANOS,

IMPERSONALES EN ZOZOBRAS,

QUE SE VAN CRECIENDO: OSANDO...

FIJASTE TU…

LAS GALLINAS DEL CORRALÓN...

Aunque ya habían pasado las Pascuas: los animalitos se remolinaban en los altos graderías del gallinero, para evitar ser alcanzados por el zorro o algún garduño, que inesperadamente se pudiera colar en aquel corralón de paredes de piedra y mucha cal, la población gallinácea había ido menguando progresivamente, hasta dejar su número en algo menos del cincuenta por ciento de lo que habitualmente la constituían.

Muchas de las gallinas y conejos habían…