"El conquistador por cuidar su conquista se vuelve esclavo de lo que conquisto, es decir: que jodiendo... se jodio!" (Facundo Cabral) hoy al despertar me saludo la mañana, Salí rápido a la ventana y me sonrió más bello que nunca el sol. Siempre me despierto escuchado a Facundo, un poeta muy profundo que siempre cantó al amor, por eso cuando un depredador nos lo alejó de…

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‘’Que fácil es escribir/algo que invita a la acción/contra tiranos, contra asesinos/contra la luz o el poder divino/siempre al alcance/de la vidriera y el comedor’’. (Silvio Rodríguez). Sentado, mientras reposo mi hartura, viendo la brisa acariciar la verde cabellera de una mata de aguacate y otra de mangos banilejos, pienso en los más de mil millones que cada noche se acuestan…

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Un velo muy fino arropa la ciudad de Santo Domingo hoy. Un velo que impidió que a tempranas horas empezáramos a freírnos. Esta preciosa mi ciudad, el color verde de las hojas de los árboles brillan con más fulgor; el termitero luce sus mejores galas en su indetenible avance por ganar el cielo; el Viejo Rey de Crinejas Doradas recargas sus baterías y nos muestra su poder de luminotécnico;…

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’Mas que el oro es la pobreza lo mas caro en la existencia, pobrecito mi patrón piensa que el pobre soy yo. ’’ Santo Domingo está como el refrán: ‘’El día más claro llueve. ’’ Amaneció con un sol radiante, pero ahora parece que está cayendo un diluvio. Lo que me recuerda mis años mozos cuando iba de vacaciones al campo, en esas casas de techos de zinc, como ronroneaba la lluvia, como invitaba a acurrucarse en una cama de esas de batidor y guata. De las tinajas que se usaban para recoger el agua… Continuar

Me gusta estar detrás de la luz de una vela

Frente a unos ojos de mujer sugerentes

Que estar viéndole la cara a un gerente

De una institución de intermediación financiera

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A Santo Domingo le llegó su fin. Un diluvio, pero de calor, está inundando a esta isla. Es nuestro fin de mundo particular. Y no podemos recurrir a los ríos porque Irene nos los dejó como brazos de mar. Y no podemos recurrir al acondicionador de aire porque las empresas eléctricas nos han metido el brazo hasta más allá del bolsillo y la cartera. Lo mejor sería subirse a una mata de Quenepa, comenzar a chupar cual críos lactantes  y hacernos los locos, mientras este calor nos convierta en…

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